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Chandigarh Cafe (Sarrià-Sant Gervasi)
Scott ChasserotChandigarh Cafe (Sarrià-Sant Gervasi)

Restaurantes de Sarrià

La mejor cocina del barrio

Escrito por
Time Out Barcelona Editors
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  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 4 de 4

El mediático Jordi Cruz ofrece una cocina sofisticada, original y sorprendente en este restaurante triplestrellado. Hace tiempo que se reconoce la valía de Cruz mucho más allá del personaje televisivo creado. Deja bien claro en ABaC que hace años que se arremanga las mangas y que domina la técnica y el producto a la perfección. Con un ojo puesto en la cocina internacional y con un pie en la del Mediterráneo, ofrece un único menú degustación de catorce platos y cuatro postres (295 €), que cambia por temporada y gusto. Más allá de los platos, la experiencia ABaC es global: comes en un comedor de ensueño y llegas a través de la cocina, donde saludarás al chef.

  • Restaurantes
  • Española
  • Sarrià
  • precio 3 de 4

Adobo/Adobar es la última aventura del genial Enrique Valentí. Un restaurante conceptual pero sencillo (que no simple), “una fonda actualizada, en la que utilizamos los abonos y los condimentos”, dice el madrileño. A Valentí –máster del sofrito, el guiso y el fuego lento– le encanta esta técnica porque “da nuevas perspectivas a platos de toda la vida”. Un ejemplo: el tártaro de picanha –corte brasileño de ternera– madurada. No es un corte tan caro como el solomillo trinchado, pero tiene mucha más personalidad, y va con un condimento que guiña el ojo a la brocheta moruna de casita de feria. En la parte del bar podrá degustar tapas y clásicos de cuchara de Valentí. Los callos y las albóndigas en el jerez son antológicos.

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  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 1 de 4

En una de las zonas más caras de Barcelona existe una casa de comidas contemporánea que sirve platos de lujo a precios casi de barrio. Sí, lo has leído bien. En los fogones, Carlos Salvador, un cocinero brutal con experiencia en Mugaritz, Alkimia y Gresca. En la sala, David Grau. Menú semanal de temporada con dos opciones de primero, segundo y postre por solo 14,20 €. Para que te hagas una idea: garbanzos estofados con calçots y picadura; muslo de pollo guisado con acelgas, boniato y curry, y pastel de cítricos. Para compartir: croquetas, buñuelos, tortillas y chistorra en sidra con yema curada, por ejemplo. El local tiene una terraza encantadora.

  • Restaurantes
  • Catalana
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4

La técnica moderna no se contradice con la tradición. Esto es precisamente lo que encontrarás en el Porvenir: platos de fonda –'capipota', garbanzos con zumo, mar y montaña– redefinidos bajo el prisma de profesionales de cocina y sala que han pasado por el Manairó de Jordi Herrera, Roger Viñas y en Chesco Salrach. Y lo cierto es que las ganas de jugar y sorprender ofreciendo una cocina llena de cuchara y fondos sustanciosos, tan característica del maestro Herrera, se nota en muchos de los platos de una carta que también deja vislumbrar la iconoclastia de raíz a la hora del aperitivo: en lugar de olivos, ¡te llevan ajos asados sin pelar! Tienen dos menús degustación.

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  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4

Ya hace unos años que dos exjefes de cocina del Saüc abrieron este bar de tapas, aunque ahora solo uno de ellos, Ferran Maicas –con experiencia en elBulli y El Celler de Can Roca–, siga al frente. Sin más pretensión que reivindicar la cocina bien hecha, presenta platillos basados en el recetario catalán y la temporada que no se alejan en estética y gusto de los que te puedes encontrar en un gastronómico Michelin. Puedes empezar por las tapas clásicas, porque las clavan, y seguir por propuestas más creativas, como las vieiras con papada y espárragos. La carta de vinos está muy cuidada.

Bar Tomás de Sarrià
  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 1 de 4

Todo el mundo lo ha dicho, todo el mundo lo dice y seguramente todo el mundo lo dirá: son las mejores patatas bravas de Barcelona. Quizá sea demasiado categórico, sobre todo por una tapa omnipresente en cualquier carta, pero lo que es seguro es que no se quedan atrás en el ranking de las mejores. El corte es irregular, la fritura con aceite de oliva las deja bien doradas y la salsa habitual, más parecida a un alioli, es generosa. Recogen mucha clientela que se desplaza al barrio solo para comérselas. Sin embargo, Tomás tiene más vida entre las tapas: anchoas, boquerones, croquetas de pollo... ¡y buenas jarras de cerveza!

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  • Restaurantes
  • Española
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4

Bar Ri se encuentra en Sarrià y no es casualidad ni gratuita la elección del nombre. Las cosas de barrio tienen un aire especial, huelen a casa y te hacen sentir en familia. Este restaurante especializado en tapas y platillos se ha hecho un lugar en un barrio donde no abunda este tipo de oferta gastronómica. Tataki de atún Balfegó, un bikini que llaman 'de toda la vida' o unos huevos al plato llenan una carta basada en cocina mediterránea hecha con productos de mercado.

  • Restaurantes
  • Italiana
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 3 de 4

Lombo, el restaurante italiano que Eugeni De Diego (uno de los ex jefes de cocina de Elbulli) ha abierto junto a su pareja Ana Alvarado, (ex pastelera de El Bulli) tiene una fuerte conexión con su libro '¿Cómo cocina un chef en casa?' (Penguin, 2021): recetas directas, para mojar pan, explicadas de manera meridianamente clara y pensadas para que sean fáciles de hacer, a la vez que tienen una dimensión gastronómica innegable. Hedonismo puro y duro.

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  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 1 de 4

Vermut, vino, cerveza, tapas (gildas, bravas, ensaladilla, torreznos de Soria, boquerones en vinagre), bocadillos y platos del día (pocos superan los 15 euros). Una muestra: bistec tártaro de vaca; hocico de bacalao y berenjena, y albóndigas con tomate y patatas. Su tortilla de patata hecha al momento, con cebolla caramelizada y jamón ibérico, le ha dado fama al barrio. Tiene un formato individual, está poco hecha y es jugosa. Si sois truchas cuajadas, no es para vosotros. En la carta verá detalles italianos; aceitunas sicilianas, burratas y bocadillos de mortadela o de mascarpone trufado y bresaola (embutido de ternera). Claro, el dueño, Peppe Palo, es de allí.

  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 2 de 4

Los dueños del veterano Restaurante Bonanova (Sant Gervasi de Cassoles, 103) se quedaron el antiguo Bar Bonanova de la homónima plaza hace un par de años. Gente con sensatez y muy buen criterio, mantuvieron la decoración sesenta del local para concentrarse en la cocina. Los parroquianos peregrinan hasta aquí sobre todo por las albóndigas con salsita, patatas paja y pimientos de Padrón, un escándalo. Pero también tienen un repertorio de tapas y platillos tradicionales de empezar a salivar y no parar; ensaladilla, capipota, croquetas, bravas, etc. Eso sí, las porciones son más bien escasas. Si Wes Anderson fuera barcelonés, sería un cliente habitual de Yeti.

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  • Restaurantes
  • Cocina creativa
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 2 de 4

El Bisavis no es simplemente un restaurante. Es una experiencia multisensorial, hecha por una excelente cocina guiada por el entusiasmo de Eduard Ros, un exabogado convertido en gastrónomo, cocinero autodidacta, sumiller y jefe de sala. Minorista y exigente, además de no poder, lo prepara todo frente a los doce afortunados comensales que caben en la barra. Evidentemente, los platos cambian según inspiración y temporada. Para hacerse una idea; ha servido ensaladilla con botarga, manada con mantequilla tostada y tartar de vaca vieja con whisky ahumado, por ejemplo. Sus más de 70 referencias de vinos son para ponerse a llorar de la emoción.

  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4

Barra de mármol, baldosas hidráulicas de cenefa profunda, techos altos, ambiente modernista. Los camareros son educados y atentos, sin ser excesivos ni pesados. Carlos, uno de los herederos del negocio familiar (¡están desde 1964!), se encarga de transmitirte la carta como es debido, con gracia; cecina y lengua de Nacho el Puta, macarrones marranos, pastel de queso muy muy bueno. Bonanova es un restaurante que exuda clase, y la cocina y el producto están a la altura de las circunstancias y del precio. Ahorra o roba, pero vaya, aunque solo sea una vez en su vida. No te arrepentirás ni del sacrificio del ahorro ni de la condena.

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  • Restaurantes
  • Gastropubs
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4

El Barra Alta es un restaurante abierto por el veterano Daniel Roca, cocinero y chef, con el joven cocinero Cèsar Guillem. La gastada palabra honestidad se llena de significado en una carta muy bien compensada. Aquí la cosa va de producto de calidad y temporada con un precio asequible y en inspiradas recetas con un punto de inventiva. Uno de esos locales que hablan bien de la clase media-alta de la gastronomía de la ciudad, donde sabes que comerás a gusto. Curiosa división de la carta, que comienza con una oferta de ostras. Después, platos para picar, fritos, fuegos y plancha y gormanderías. Sí, postre. Pide los de chocolate y sal y comprenderás mejor la ciudad.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Catalana
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

Allí donde antiguamente estaba el Mató de Pedralbes, hoy encontrarás a su heredero, Bistro Mató, a cargo del Grupo San Telmo, que tiene cinco establecimientos en Barcelona. La suya es una localización que despierta envidias, con una de las terrazas más codiciadas de Pedralbes y ocupando un precioso edificio modernista. Y la carta es una lista de delicias que pone especial énfasis en la brasa y el producto de temporada. Desfilan ensaladas de tomates de km 0 o la verde con requesón y alcachofas a la brasa o con setas, butifarra y yema de huevo, plumas ibéricas a la brasa y unos arroces, como el del Senyoret o el de costilla con trompetas amarillas, ¡tan buenos que incluso preparan para llevar!

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  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 4 de 4

Un verdadero clásico de la zona alta –¡abrió en 1972!– que ha revivido desde que en el 2022 se hizo cargo el chef Jordi Conill, ex-Coure, un cocinero que apenas ahora inaugura la treintena. Con la ostra Gillardeau hay una pequeña declaración de intenciones: añade shichimi togarashi, mezcla japonesa de especias. Pero no ha venido a trastornar el restaurante, sino a renovarlo sin romper el mobiliario. Así, aquí conviven recetas de clasicismo francés de gran hotel –el solomillo Wellington– con recetas populares (ha mantenido los garbanzos de Lluís (¡medio siglo en carta!) y croquetas de cochinita pibil. Y por supuesto, el entrecot en salsa francesa que le da nombre: Lujo y romanticismo.

Casa Trampa
  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 2 de 4

Casa Trampa es símbolo de lo que un día fue Vallvidrera cuando aún no existían segundas residencias o primeras de recién llegados barceloneses. Es una fonda de las de siempre que todavía se mantiene bastante parecida, con el espíritu de alimentar a cualquiera que pare. Aquí, las raciones generosas de ternera con setas, guisantes con jamón, macarrones caseros y albóndigas con chanfaina... todo vuela. Cocina casera sin demasiados miramientos más allá del objetivo de ofrecer buena comida a los comensales. Hacen menús a precios bastante populares y desayunos fuertes que suelen ser el aliciente de muchos ciclistas de fin de semana que hacen parada. ¡Seguro que se remontan todas las crestas después de un festín en Casa Trampa!

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  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Pedralbes

En una casa con jardín en Pedralbes, con un maravilloso patio de árboles y un interior lleno de diseño clásico, el chef francés Hervé Escobar firma una carta tan elegante y precisa como el propio local. Va llena de huerta de temporada y platos saludables, pero el sabor estalla en delicias como las croquetas de peladilla de pato, o un onglet de ternera al carbón que se deshace en la boca. Este es un lugar de lo más interesante por su versatilidad: puedes comer desde delicadezas como una berenjena con sanfaina y yogur griego ahumado, todo un placer meloso y cardiovascularmente afable, hasta hacer fiesta grande con pizza y pasta de alto nivel.

  • Restaurantes
  • Mediterránea

Una bodega irreverente en el corazón de Sarrià. Las recetas mediterráneas y de mercado son la insignia de su cocina, que también sirve preparaciones al carbón todas las noches de lunes a sábado, así como los fines de semana al mediodía. Además, cada mediodía tienes la posibilidad de montarte un plato con acompañamiento y bebida. Sus platillos incluyen clásicos como la croqueta de setas, la rusa picantina o las bravas de la casa, que en la carta se escriben con una exclamación (¡bien merecida!). Tiene un precioso salón, el Vilà, donde se pueden realizar cenas y eventos privados. Y, sobre todo, es ideal para ir a vermut a la pintoresca terraza, situada en la plaza de la iglesia de Sarrià.

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Coure
  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

Una barra larga muy frecuentada por los amantes de la buena cocina por la calidad de los platillos que ofrecen. Un nombre: Albert Ventura, el chef que siempre resuena en la lista de los más recomendados de Barcelona. Un espacio más informal, el de la barra, comparado con el restaurante en sí, más íntimo y elegante. El Coure es todo un referente de la cocina de autor más creativa de la ciudad. Ingredientes de primerísima calidad muy bien cocinados por Ventura. A su fama le ayuda el cuidado servicio de sala, que multiplica la experiencia. De esos lugares que vale la pena repetir si consiga hacerse un sitio! ¡Cada vez son más los que le adoran!

  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Tailandesa
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

Han ampliado el local original y han abierto otro (Balmes, 106) para la clientela que lo suplicaba. Esta es la solución que han encontrado en el Petit Bangkok a la alta demanda de mesas en su restaurante. Y es que los amantes de la cocina tai adoran este establecimiento del que ya hace muchos años que se habla. La fama no es infundada: son buenísimos sus rollitos, muy sabrosos, que pueden ser con pollo, gambas o pato (también con opción vegetariana). También hacen de vietnamitas, con pasta de arroz, gambas, verduras y hierbas frescas. Si tenemos que elegir algún otro plato, seleccionamos la sopa picante de especias tai con gambas, champiñones y jugo de lima que sacude el cuerpo, y los currys y woks combinados con diferentes ingredientes son top!

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Flash-Flash Truiteria
  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

¿Qué hace que una cosa sea tendencia? Un gran músico me dijo: "Las tendencias van en círculos. Tú quédate quieto trabajando tranquilo, que si lo haces bien, la moda te atrapará. Viene a cuento por el Flash Flash: un caso, más que atípico, único. Abierto el 3 de julio de 1970 por la aristocracia de la Gauche Divine –los matrimonios Leopoldo Pomés / Karin Leiz y Alfonso Milá / Cecilia Santo Domingo– llegó a los 50 años de vida en julio de 2020.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Cocina creativa
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

El sello de Mey Hofmann es señal de alta gastronomía de escuela con referentes catalanes y del uso de las técnicas más avanzadas. No en vano, el restaurante que lleva el apellido de la añorada chef conserva una estrella Michelin desde el 2004. Os encontrará con una carta llena de referentes de nuestra cocina tratados con finura. Comerá platos como el capipota crujiente, la espuma de atún o el arroz seco con alcachofas, alpargatas y emulsión de perejil. El postre es también “de escuela”, claro, tratándose de Hofmann. Y si conoce su pastelería, sabrá que aquí los dulces ocupan un lugar especial, ¡espectaculares para poner punto final a la comida!

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  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 2 de 4

Etoile tiene historia: se fundó en 1979 y se ha ganado el apodo de Gran. Grande y versátil: ya que puedes desayunar, comer, hacer cañas y cena (con mantel). En el desayuno encontrarás un surtido de tortillas de patatas que los vecinos no dudan en poner a la altura de las mejores de Barcelona, bocadillos potentes... ¡y también desayunos de tenedor! Para el almuerzo y la cena, la carta ofrece una selección de tapas y platillos con finura de acabado y relación calidad-precio óptimo. Algunos ejemplos: tarrina de púas de cerdo, tártar de atún, melocotón y maio de wasabi y cola de vaca con parmentier de patata. Lo hacen fácil, todo apetece y abren todos los días de la semana.

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

Flying Monkey, el restaurante de Ronit Stern y Rafael Campos abierto en el 2022 –propietarios de La Balabusta y Auto Rossellón– refleja la personalidad culinaria de Stern
–autodidacta y perfeccionista total– en un formato versátil. Puedes desayunar, comer, merendar y cenar muy bien: todo de la mejor calidad, de acuerdo con un producto de proximidad de pequeño productor y estricta temporada, hecho desde cero (ved los sacos de harina del pan bajando las escaleras).

 

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Hisop
  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Cocina creativa
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

El chef Oriol Ivern presenta en Hisop una cocina que le será familiar en cuanto a la raíz, pero muy creativa por la puesta en escena y la combinación de sabores. En definitiva, natural como lo es el chef y su equipo, sin querer decir más que lo que te encontrarás en el plato. En resumen. Y la verdad es que lo hacen de maravilla tanto en la sala como en los fogones. Tienen una estrella Michelin, quizás la que pasa más desapercibida de la ciudad y dicen que la más económica (el menú de cata vale 85 €). Pero no menos merecida. Cocina catalana contemporánea, como ellos definen, basada en el producto. Y esto queda claro en creaciones como la caballa con cardo y wasabi. ¡Éxtasis! Conviértete en hisopista.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Cocina creativa
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

El sello de Mey Hofmann es señal de alta gastronomía de escuela con referentes catalanes y del uso de las técnicas más avanzadas. No en vano, el restaurante que lleva el apellido de la añorada chef conserva una estrella Michelin desde el 2004. Os encontrará con una carta llena de referentes de nuestra cocina tratados con finura. Comerá platos como el capipota crujiente, la espuma de atún o el arroz seco con alcachofas, alpargatas y emulsión de perejil. El postre es también “de escuela”, claro, tratándose de Hofmann. Y si conoce su pastelería, sabrá que aquí los dulces ocupan un lugar especial, ¡espectaculares para poner punto final a la comida!

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  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Coreana
  • Crítica de Time Out

El Koryo es un pequeño oasis de sobriedad y serenidad, entre el cemento rompepiernas del Putxet. Ahyun Sun lo abrió hace diez años, y es un imprescindible del barrio. La carta es corta, pero encontrará platos clásicos sobre todo coreanos y algún japonés que cambian según las
temporadas. Por ejemplo, de Corea: chaguechi (pasta con salsa de soja, queso y huevo frito) y dolsot bibimbap (arroz cubierto con verduras, ternera, huevo y salsa gochujang en un cuenco de piedra caliente). De Japón: shoyu ramen (con verduras, tofu y huevo) y cuatro tipos diferentes de curry. De postre, el mix de minipastelitos de pié de limón, pastel Tatin, de chocolate y de té verde.

  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 2 de 4

Esta pequeña charcutería de tan solo siete mesas presenta una cocina casera y catalana digna de mención, que se vehicula en un menú de mediodía y en un menú degustación, y un horario de cocina ininterrumpida. Excelentes canelones y tarta de escórpora; cremas frías y calientes; 'cazuelitas' y carnes asadas. Todo puede llevarse a casa, comprado en la tienda. Buenos vinos y magnífica repostería completan el panorama. Si hacéis una reserva a partir de doce personas, os abrirán el restaurante para vosotros solos.

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  • Restaurantes
  • Sarrià
  • precio 3 de 4

El grupo Isabella's es una de las empresas de restauración que más ha crecido en los últimos años (¡nueve restaurantes!). Pero si por algo triunfa en la zona alta el primer local de la saga se debe a que se ha establecido como un restaurante casero, con aroma de cocina de la mamma y un espacio de lo más chic. En el primer restaurante que abrió la romana Isabella Hesseltine manda una carta que es goce puro, de los de mojar pan (bueno, focaccia). Tienen recetas de pasta muy conocidas, como una auténtica carbonara, u otras que no lo son tanto, como por ejemplo unos maccheroni con alcachofas y guanciale que se han convertido en un icono de la casa. Entrantes, carnes, pizza, pescado... Todo como en Roma.

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • China
  • El Putget i Farró
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

Meilan Kao, hija del mayor Josep Maria Kao, uno de los primeros asiáticos en arraigar y triunfar en la ciudad, trata el dimsum –esa empanada asiática que tiene un nombre diferente según cada país: gyoza, momo, shaomai– desde la perspectiva del alta cocina. La gracia de estos farcellets es la pasta que utilizan, hecha a mano, y los rellenos muy trabajados que elevan este restaurante a la categoría de cocina moderna. Los hacen crujientes, como el rollo nem vietnamita, de pasta de arroz con lomo y verduras, hervidos y al vapor. También podemos comer platos de aires chinos y catalanes, como una costilla asada con salsa agridulce, así como judías salteadas con bacon y guisantes del Maresme.

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  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Pizza
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • Crítica de Time Out

Max Morbi –mórbido significa blancura delicada, gran nombre para un pizzero– es un firme defensor de una nueva forma de hacer pizza: “La pizza es sobre todo textura. Es necesario un buen equilibrio con el gusto, y somos partidarios de llevarla al terreno de la alta panificación”. Ellos son italianos, pero van “descubriendo todo lo que te dice la tradición que no debes hacer”. En La Balmesina, abierta desde el 2017, encontrará tres masas (a partir de masa madre y muchas horas): la clásica, fina y crujiente; una de espelta integral, y la Pala. Esta última, una rectangular para compartir, en porciones. Ellos marcan el camino a seguir en la pizza moderna.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 1 de 4
  • Crítica de Time Out

El nombre ya lo indica: aquí se viene a comer tortilla. Joan Antoni Miró empezó muy joven en la hostelería, como camarero. Y de formación culinaria del todo autodidacta, lo primero que aprendió a hacer fue una tortilla (de hecho, en los grandes restaurantes clásicos, la prueba más habitual para entrar a trabajar era hacer una tortilla a la francesa).

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  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Francesa
  • Sant Gervasi - Galvany
  • Crítica de Time Out

Desde su apertura, el Monocromo es conocido como bistrot de vinos. Pero no es sólo eso. Sí, la carta de vinos que han construido los dos propietarios –los hermanos Janina y Xavier Rustia, con predilección por los vinos naturales– es algo más que notable; pero además encontrará una aproximación a la cocina catalana modélica y poco rígida. Hacen platos que ya son clásicos de la casa, como unos extraordinarios macarrones de sofrito y zumo principesco. En la carta tiene otras delicadezas, como una escalivada reconcentrada que es una explosión de sabor. La carta es corta, de temporada radical y provista por pequeños y selectos productores.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Marisco
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 1 de 4
  • Crítica de Time Out

Cambió de local justo antes de la pandemia y le ha capeado para erigirse ahora en uno de los templos de comida bien de la ciudad. Ahora está en la plaza Molina, junto a Varela, con quien comparte propiedad José Varela. Con la plaza conquistada, José sigue apostando en La Red por una carta de producto comprado a proveedores de proximidad y confianza, como la carne de Discarlux, el pescado de Piscis Sampera, las frutas y verduras de Pau Santamaria y los quesos de la Villa Viniteca. El alma de esta cocina es realzar el producto excelente con una intervención mínima, para que el protagonismo corresponda a la cocción más adecuada.

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Shanghai
  • Restaurantes
  • China
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 3 de 4

Las fotografías del chef Josep Maria Kao con Pep Guardiola y otros famosos decoran la entrada del Shanghai, uno de los mejores (y más veteranos) restaurantes chinos de Barcelona. Han sabido hacer las cosas bien y por eso se han mantenido como uno de los referentes de la ciudad. Kao ha sido capaz de fusionar la delicadeza de la cocina heredada de sus padres con la calidad de la materia prima local. Él mismo se encarga de ir de compras a la Boqueria. La carta varía según la temporada. ¡Es el lugar donde pedir pato lacado, un gran acierto! También destaca el surtido de platos de pescado y marisco con verduras o bambú.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Japonesa
  • El Putget i Farró
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

Sensato es de los maestros de sushi Ryuta y Aya Sato, de trayectoria inmaculada (Nomo, Aiueno, Sato y Tanaka). Una barra minimalista de sushi con ocho sillas por servicio y vuelta catalana; lista de espera de tres meses y omakase. Oma, ¿qué? Los chefs observan a los comensales y deciden qué les servirán. Es decir, un único menú degustación compuesto por varios platos y una sucesión de piezas de sushi, que varían según el calendario de ingredientes y la disponibilidad del mercado. Ostras ahumadas, sopa de almejas, gunkan de atún con huevo curado de codorniz, sushi flameado, escaldado y marinado... Los postres no se quedan atrás; helado de miso con crujiente.

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  • Restaurantes
  • Sarrià

El Grupo Confiteria se planteó una tarea difícil: recuperar y renovar la esencia de la antigua y mítica Xarcu de la plaça Molina, con tanta historia vivida en el barrio, y lo ha logrado con éxito. La Bodega Molina combina tradición y modernidad tanto en la decoración como en una carta exquisita llena de tapas y platillos gourmets que hay que degustar. Desde los macarrones de la abuela o las albóndigas con sepia hasta un steak tártar ahumado con yema de huevo y piparra, pasando por los huevos fritos con sobrasada de Mallorca y una variedad de tortillas que hacen venir salivera. Puedes ir a cualquier hora del día, y comer dentro o en la terraza y al sol, te sentirás como en casa.

  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Asiática contemporánea
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

Tamae junta a dos cocineros capitales de los últimos veinte años: dos ex jefes de cocina de elBulli, Eugeni de Diego (Lombo) y Albert Raurich (Dos Palillos), que ofrecen su versión de la comida asiática más apta para el take away en la creación de un modelo de restaurante que, de hecho, no lo es. Es una cocina abierta y una barra con ocho plazas donde trabajan la comida a domicilio y para llevar, con los estándares de excelencia y creatividad correspondientes (no olvide que detrás de la visión de Asia de elBulli está Raurich). A nadie pueden decepcionar delicias para comer con una mano, como unos impresionados nigiris XL o un baño de tártaro de ternera con huevo frito.

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  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Catalana
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 3 de 4
  • Crítica de Time Out

Tras la aparente sencillez de una barra de bar, el Ultramarinos Marín esconde un horno de leña bajo la dirección de Borja García, que ha pasado por ese templo de la cocina primitivista que es el Dos Pebrots. Volvemos al concepto de bar, pero con elaboraciones en las que un enunciado espartano no esconde fuegos artificiales, sino lo mejor que puedes hacerle a un producto. Un ejemplo: la patata hervida, escalivada y pasada por la plancha con manteca colorá. La carta solo tiene tres apartados: a la plancha, a la vitrina y de Marín. Lo hacen todo ellos: curan embutidos, secan peces, se hacen la chistorra. La sublimación del bar con el mejor producto cotidiano posible.

  • Restaurantes
  • Japonesa
  • Sant Gervasi - Galvany
  • precio 3 de 4

Atsushi Takata: "Jamás he pensado que tengo un restaurante japonés, no lo dice a mi tarjeta". Y tiene toda la razón del mundo. Él fue pionero en 2002 a mezclar Japón con Cataluña –ese maravilloso Icho ¡ah, los fideos de sepia con papada!–, y conoce y ama a fondo la cocina catalana y ejerce sin etiquetas ni jaulas. Solo hace 'omakase'. El abundante menú, a 57 euros, pasa por tapitas, tres platos de temporada de media ración y la elección entre un surtido de sushi o alguna otra especialidad, siempre barbaridades de sabor y técnica delicada, como su tempura de alcachofas con langostinos. ¡Un plato que une Hiroshima con el Prat de Llobregat!

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  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Sarrià - Sant Gervasi
  • precio 4 de 4
  • Crítica de Time Out

Carta rellena de grandes platos de cocina de mercado, con los mejores ingredientes y las combinaciones más frescas, firmadas por el chef Jordi Vilà, responsable del menú, quien volvió a colocar este pequeño restaurante de mucha historia en un punto elevado y de referencia de la buena cocina. Platos muy bien hechos y no excesivamente caros: surtido de tarrinas de la casa, jabalí con ñameras y castañas, tronco de merluza con sofrito y romesco de patata. Es difícil pronunciarse por los mejores, ya que el alud creador de Vilà pone las cosas difíciles. Además, el espacio tiene una agradable terraza interior, ideal para noches de primavera, verano y otoño.

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