Las mejores bombas de Barcelona

La bomba de la Barceloneta "es en realidad la bomba de La Cova Fumada", explica Josep Maria Solé, tercera generación de un establecimiento donde hace 61 años su abuela, Maria Pla, inventó esta delicatessen. La popularizó Magí, padre del Josep María, que con una combinación de carisma, gracia, una contundente salsa picante y una receta secreta, creó la leyenda. ¿Qué tiene la bomba de La Cova Fumada? "Te diré lo que no tiene: puré de patatas de sobre y otras salvajadas que se pueden ver por el barrio", dice Josep María.

Precio: 2 €

María Jesús Otero, propietaria de La Bombeta desde hace 40 años, asegura con orgullo que "fuimos los segundos en hacer bombas", tras La Cova Fumada. Pero la receta no es suya, sino de los anteriores propietarios, que cedieron generosamente a los recién llegados, los que la guardan cerrada con llave en el más estricto secreto. Sólo hemos podido saber que ellos la hacen con carne de cerdo, que consideran una excentricidad hacerla con ternera y que muchas cosas han cambiado en La Bombeta en los últimos 40 años, muchas. Pero nunca la bomba.

Precio: 3,40 € (2 bombas)

La historia de la magnífica bomba del Senyor Vermut es irresistible. Cuando Jordi, su propietario, decidió abrir una vermutería en el Eixample, una de las primeras cosas que hizo fue irse de tapas con su cocinera, Maricel, filipina. La chef quedó tan fascinada con esta contundente pelota de patata y carne (aquí la hacen de cerdo y ternera) que al día siguiente le presentó a Jordi su adaptación, que se ha convertido la tapa estrella (con permiso de las bravas) de este local que nunca falla.

Precio: 2,50 €

Que la Barceloneta es como un pueblo lo demuestra el hecho de que Jaume Muedra, propietario de esta tapería moderna, es nieto de los fundadores de La Bombeta, y que, preguntes a quien preguntes, todo el mundo te lanza una mirada críptica cuando pides que te cuenten cómo hacen la bomba, el Santo Grial particular de los cocineros del barrio. La de L'Òstia es espléndida, su receta es secretísima y es exactamente la misma de aquella bomba que hacían hace décadas los abuelos de Jaume en La Bombeta. Si la vida os lleva a L'Òstia, probad también el calamar. Es delicioso.

Precio: 1,75 €

Sus paellas son una maravilla a la altura de su vista y tienen tapas ya míticas como unas bravas deliciosas. Es el caso también de su pequeña bomba, una tapa que combina ternera y cerdo con un sofrito de tomate y cebolla, se reboza con pan rallado y se sirve acompañada de salsa brava suave y alioli.

Precio: 3,20 € (2 bombas)

Este clásico de la Barceloneta, con una agradable terraza ubicada en una plaza tranquila y encantadora, cambió de propietarios hace aproximadamente un año y dio un giro a la carta sin tocar, afortunadamente, una bomba mítica 100% ternera que se sirve con una salsa picante y alioli. Tapas clásicas como esta y unas bravas muy buenas acompañadas de salsa boloñesa conviven con creaciones de talante más contemporáneo, como la vieira a la plancha con morcilla sobre crujiente de frutos secos.

Precio: 1,70 €

El único ejemplo upper Diagonal de la lista es la bomba de esta antigua taberna de Sant Gervasi, que reabrió hace cuatro meses de la mano de tres hermanos que querían combinar las tapas clásicas con otras más modernas (tienen un bocadillo de 'porchetta' muy popular) en un local con encanto. Y es que comerse una bomba en una antigua taberna ahora 'hipster', ante la colección de llaveros que cuelgan de las paredes (herencia del antiguo propietario) en Balmes-Mitre demuestra que, afortunadamente, Barcelona todavía nos puede sorprender.

Precio: 3,90 €

Los restaurantes clásicos de la Barceloneta conviven con otros de nueva creación que mantienen, sin embargo, el recetario tradicional del barrio. Es el caso de este local abierto hace poco más de un año, de aire cool y contemporáneo, que tiene un trío de mini bombas de butifarra con mucho éxito entre la parroquia. Tapas como esta, las bravas y la ensaladilla rusa conviven con platos con un toque más glamuroso, como el huevo cocido a baja temperatura con cremoso de patatas, setas y foie gras, que demuestran que tradición y modernidad pueden ser grandes amigas.

Precio: 2,80 €

La bomba en bote es una versión sui generis de la bomba clásica de la mano de un chef aficionado a las marcianadas deliciosas, Jordi Herrera (Manairó), que hace unos meses tomó el timón de este restaurante de la Barceloneta, hermano menor del mítico Can Ramonet. La bomba del siglo XXI se hace íntegramente con ternera, se reboza con panko (un pan rallado japonés más ligero y crujiente), se come con cuchara, llega a la mesa tapada y se destapa el momento para dar lugar a un espectáculo que vale la pena disfrutar.

Precio: 2,10 €

Sergi Arola es aquel chef que llegó del Hospitalet para comunicar al mundo que las bravas también pueden ser alta cocina, y lo hizo desde uno de los espacios con más encanto de Barcelona, reservado sólo para bolsillos solventes: su restaurante del Hotel Arts. Su bomba de pato confitado con salsa hoisin y puré de patatas con un toque anisado, rebozada con harina y panko, demuestra que Arola y los suyos han aprendido muy bien cómo funciona el orden establecido, conscientes de que es el único modo de cargárselo.

Precio: 5,50 €