Time Out en tu buzón de entrada

Buscar
  1. Güd
    © Maria Dias Güd
  2. Scoops
    © Maria Dias Scoops
  3. Shanti Gelato
    Shanti Gelato
  4. Pyreneum
    Pyreneum

Polos artesanales en Barcelona

Vuelve el polo de nuestra infancia, en versión casera y saludable

Ricard Martín
Escrito por
Ricard Martín
Publicidad

Por más que nos llenen la cabeza hablándonos de la patria y de los beneficios de ser patriotas, uno siempre acaba pensando que solo hay una patria (bueno, dos, pero son indivisibles): la infancia y la lengua materna. Y el helado, delicioso médium que nos une con el fantasma del niño que éramos, este verano está más ‘patriota’ que nunca: no es que nos vendan helados con los colores de la roja y gualda y de la 'senyera' (que seguro que sí), pero puedo afirmar (y afirmo) que el polo, el helado con palo de nuestra infancia, vuelve en versión artesanal.

Encontramos una muestra en la 'palotería' –¿sirve esto para hablar de tiendas de helados con palo?– que hace un par de meses ha abierto detrás de Santa Caterina: en Güd (Giralt el Pellicer, 2. Cada día, de 10 a 22 h), un local tan pequeño como la callejuela que habita, la italiana Nadia Inout hace y vende unos polos que nos recuerdan a los colajets, dráculas, frigopies y otras marranadas proustianas. Pero sin el sabor químico que disparaba las papilas infantiles a hacer el baile de San Vito. “Estos polos son un 70% fruta y agua. Y ya está. Se trituran y se ponen en el molde”, dice. Me como el de frutas del bosque y suena increíble: es amargo, ácido y muy refrescante. Lleno de sabor y no empalaga. “No tiene sentido ponerle azúcar a la fruta, ya tiene suficiente, y este es un buen producto porque es sólido, no es el típico helado de aire que se desinfla”. 

Los sabores son atípicos y muchos tienen coartada saludable: el gran hit es el polo de zanahoria, naranja y mangó, versión helada de un 'smoothie' energético. Pero también tiene algunos que hacen levitar las neuronas infantiles: el de galleta Oreo (que en su conjunto no es ninguna guarrada industrial. Es un helado de leche y nata, eso sí, con trocitos de la satanizada galleta de Nabisco).

Curiosamente, unos metros más abajo encontramos Scoops Gelato (Pl. de la Llana, 19. T. 631 923 921), una heladería más grande donde los polos ocupan un lugar preeminente. Su propietario, el indio Puneet, presume de ofrecer polos “100% naturales, sin nada de gluten, azúcar o lactosa”. El polo más pedido es el de arándanos y mango, y por el morbo de comparar pido uno de frutos de bosque, que me parece tan solvente y ligero como el que me he comido en el Güd.

Sabores rompedores
Además de la vuelta del polo, es un hecho que la versión saludable de los helados empieza a pesar mucho. Encuentro una prueba en las heladerías Shanti Gelato (Carders, 18 y Canvis Vells, 2), impecables establecimientos de fabricación artesana y origen italoargentino. El copropietario, Daniel, me habla de “dar mucha importancia a los helados veganos, no por el hecho en sí sino porque cada vez más celíacos y gente que no quiere lactosa los pide”. De pequeños saldríamos corriendo (a buscar el colorante congelado que se llamaba Burmar Flax) ante la perspectiva de un helado de piña y apio. Pero lo pruebo y es ácido, anisado y refrescante, recuerda más al hinojo que su pariente antipático. Buenísimo (también encontraréis todos los helados de fiestas, claro, y otras diversiones 'healthy' como el de naranja y jengibre).

Y ya se sabe que comer saludable va directamente ligado con el km. 0. Pyreneum Gelats, una empresa con base en Bellver de Cerdanya, tiene tienda en la plaza de la Vila, 5. Francisco Ramírez, el encargado, explica que su hecho diferencial es “la leche y la nata frescas de cooperativas del Cadí, el Alt Urgell y la Cerdanya” y el producto comprado directamente a pequeños elaboradores. Aquí encontraréis helado de miel y requesón, de caramelo y mantequilla salada, de flor de sauce y fresa... ¡De mostaza de tupí de Bor! ¡O de tomillo!

Este último, delicioso, te lleva directamente de la temperatura sahariana a las cimas. “Ninguno de los helados lleva leche en polvo o lactosa”. Este es un proceso en el que no entran ni conservantes, ni colorantes, ni sabores artificiales”, dice el encargado, quien antes de llevar la tienda limpió las vainas de vainilla.

Güd Helados
  • Tiendas
  • Tiendas gourmet
  • precio 1 de 4

En un local tan pequeño como el callejón que habita, la italiana Nadia Inout hace y vende unos polos que nos recuerdan los colajet, dráculas, frigopies y otras marranadas proustianas. Pero sin el sabor químico que disparaba las papilas infantiles a hacer el baile de San Vito. "Estos polos son un 70% de fruta y agua. Y ya está. Se trituran y se ponen en el molde ", dice. Como el de frutas del bosque y suena creíble: es amargo, ácido y muy refrescante. Lleno de sabor sin ser empalagoso.

Scoops Gelato
  • Tiendas
  • Chocolate y dulces
  • Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera
  • precio 1 de 4

A Scoops Gelato els polos ocupen un lloc preeminent. El seu propietari, l’indi Puneet, presumeix d’oferir polos “100% naturals, sense gens de gluten, sucre o lactosa”. El polo més demanat és el de gerds i mango.

Publicidad
Shanti Gelato
  • Restaurantes

Este es el proyecto de Daniel y Julieta, un matrimonio argentino que ha encontrado su lugar en el mundo en Barcelona ejerciendo de heladeros artesanos (ya sabéis que este oficio los argentinos lo llevan en la sangre). En 2009 abrió su primer local y en 2011 una sucursal en Carders, 18 (que abre todos los días de 14 a 22 h). La pareja destaca que aprendieron el oficio de hacer helados al modo italoargentina, "aquel que te transporta a un lugar donde el helado son postres obligados" y que sólo trabajan con buen producto de proximidad.Los sorbetes se preparan con fruta de temporada de la Boqueria, fresca del día, y encontramos sabores como melocotón, pomelo, higo, cereza, manzana verde o kiwi. Y las cremas se elaboran con nata, leche fresca y azúcar, con propuestas tan atractivas como menta con chocolate. Y aparte de ofrecer sabores sorprendentes (como el helado de vino tinto o el sorbete de mojito!) prestan especial atención a la pastelería vegana (también de elaboración propia) y hacen helados con leche de arroz aptos para intolerantes a la lactosa y para celíacos.

  • Tiendas
  • Tiendas gourmet
  • Gràcia

Pyreneum Helados, una empresa con base en Bellver de Cerdanya, tiene tienda en la plaza de la Vila, 5. Su rasgo diferencial son la leche y la nata frescas de cooperativas del Cadí, Alt Urgell y la Cerdanya, y el producto comprado directamente a pequeños elaboradores. Aquí encontraréis helado de miel y requesón, de caramelo y mantequilla salada, de flor de saúco y fresa ... De mostaza de Tupí de Bor! O de tomillo!

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad