Cels

De: Wajdi Mouawad (Traducción de Cristina Genebat). Dir: Oriol Broggi. Con: Xavier Boada, Marcia Cisteró, Eduard Farelo, Xavier Ricart, Ernest Villegas, Carles Martínez.

El teatro de Wadji Mouawad no deja nunca indiferente, y en consecuencia provoca la adhesión o el rechazo de un discurso apocalíptico que escarba siempre en la profundidad del alma humana y donde se mezclan la filosofía y la poesía con la sangre que brota de los cuerpos. A pesar de formar parte de una tetralogía, 'Cels' es un texto un poco lejano de los aplaudidos 'Incendis' o 'Litoral', tanto por la anécdota teatral como por la densidad de la palabra del autor. En ciertos momentos puede hacerse incluso incomprensible, como en los poemas del padre de Valéry, y en otros el texto resuena muy grandilocuente. Esto no quita que 'Cels' incida en el tema primordial que impregna los textos de Mouawad: la búsqueda de la identidad. Y que encontramos en la obra recortes de reflexiones contundentes y bien elaboradas como el monólogo sobre la amistad y la paternidad que interpreta Eduard Farelo.

'Cels' nos presenta lo que podría ser una célula secreta de la CIA que controla las comunicaciones y que sigue las pistas de unos mensajes que hacen prever un atentado. El suicidio del criptógrafo y la llegada de un amigo de éste, también criptógrafo, es el desencadenante del conflicto que se mezcla con las historias personales de los cinco expertos.

Un argumento muy cinematográfico, casi un thriller, que Oriol Broggi sirve con enorme exigencia y unos intérpretes francamente acertados entre los que sobresale la verdad inapelable de Eduard Farelo (la amistad), la decadencia (Xavier Boada) o el dolor y la culpa de Marcia Cisteró, pese al forzado final de todo. Magnífico el espacio sonoro (Damine Bazin) y muy bien resuelto el juego con las pantallas, en este caso elementos imprescindibles de la dramaturgia. Una función muy interesante.