Yo Unamuno. Sus manuscritos en la BNE

La egolatría es el 'mal' quizá más achacado a la figura de Miguel de Unamuno. Un mal que bien pudo ser una virtud, ya que tuvo su reverso en tanto que fuente de inspiración y en el hecho de encerrar en sí a una personalidad tan inmensa y compleja como la de este gigante de las letras castellanas y miembro destacado de la llamada 'Edad de Plata'. Un carácter que ahora se muestra al descubierto en la serie de manuscritos exhibidos en la Biblioteca Nacional en torno a la muestra 'Yo Unamuno'. Una exposición que nos descubre al intelectual y al artista, pero también al hombre, en sus momentos de convicción y aliento, y también en los de incertidumbre y desesperanza. Destacan, entre las obras expuestas, 'De Fuerteventura a París: diario íntimo de confinamiento y destierro vertido en sonetos' (1924-1925) o el drama 'El pasado que vuelve'.