Ruta de azoteas por Madrid: comer y beber con vistas espectaculares

Acaba de estrenarse y será un imán para todo el que ande paseando o "turisteando" por el centro de Madrid, un desahogo después de tanto bullicio, un relajado y asequible oasis en mitad del asfalto y con vistas al legendario neón de Tío Pepe y al famoso reloj de cada Nochevieja. Se llama Nota Alta, es un espacio bastante grande (perfecto para estar cómodo) y se esconde en uno de los nuevos hoteles que han abierto recientemente en la capital, UMusic Hotel (Paz, 11).

The Principal Madrid, el primer cinco estrellas en Gran Vía, estrena un nuevo espacio en las alturas que antes estaba a cubierto en su sexta planta. Lo han llamado La Pérgola y está abierto a huéspedes y visitantes por igual. Y tiene unas vistas increíbles frente al emblemático edificio Metrópolis (estos días en plena transformación hacia un hotel de lujo). Y sirven unos espléndidos cócteles que saben mejor al atardecer bajo los toldos rojos. Picoteo tradicional (ensaladilla rusa, bravas, cochifrito...) en versión refinada y tragos con guiños madrileños (La Movida, Retiro o Chulapo) a los que se han sumado dos curiosidades: 11 y 6 y Suspiro de Bandoneón, la aportación del destacado bartender argentino Martín Suaya (hotel Casa Lucia en Buenos Aires) que ha dejado su impronta en la carta líquida. 

La sexta planta del histórico Palacio de Cibeles, actualmente sede del Ayuntamiento y escenario para todas las exposiciones de Centrocentro, luce resplandeciente estos días de invierno. Los responsables de Azotea Grupo, que llevaban años detrás de esta privilegiada ubicación (desde la que además ven otro de sus "dominios" más populares: la azotea del Círculo de Bellas Artes), acaban de abrir las puertas de todos sus espacios gastro, renovados de manera integral. Hay un café con desayunos y asequible menú del día en el segundo piso pero a la joya del lugar se llega en ascensor. Una nueva parada para el ocio y lo culinario con aforo para más de 350 clientes de manera simultánea repartidos en sus 1.000 metros cuadrados.

Si sois de los que buscáis mayor intimidad de vez en cuando, no os perdáis este espacio. Si a pie de calle tenéis Ticuí, un vibrante comedor mexicano contemporáneo, en la séptima planta de Cedaceros, 6, y de los mismos propietarios, encontraréis a Nela (Daniel Quezada) dando "clases magistrales” de los distintos destilados del ágave. Probado su Mezcal Julep o El Buen Juárez. Todo servido en un ambiente relajado y rodeado de puro diseño, con las firmas más punteras de México ahora mismo en arquitectura, mobiliario y artesanía.

Puede parecer una azotea más, pero la que acaba de abrir bajo el cielo de Madrid en una esquina privilegiada de Montera lo tiene todo para convertirse en una de las mejores de la Gran Vía (y son unas cuantas). Cosmopolita, de diseño, castiza, con camas balinesas y un rooftop panorámico que se levanta bajo la atenta mirada del reloj más icónico de la calle: el del edificio Telefónica, situado prácticamente encima de la terraza. 

Familia La Ancha (Fismuler, The Omar...) y Azotea Grupo (responsables de Picalagartos o la azotea del Círculo de Bellas Artes, entre otras fabulosas panorámicas) unen fuerzas para apadrinar el espacio gastronómico con las mejores nuevas vistas del centro de Madrid. Ubicado en las plantas 14 y 15 del legendario Centro Colón, el Club Financiero Génova, inaugurado en 1973, no solo tiene una de las más fabulosas panorámicas 360º de la capital sino que ahora cuenta también con el placer diario y la elegancia contenida que siempre ofrece la cocina de Nino Redruello. 

En la séptima planta del Four Seasons Hotel (con acceso independiente desde la calle Sevilla) apareció una nueva cocina de Dani García. En la carta se resume, adaptada, parte de su trayectoria a la vez que aparecen algunos iconos del recetario tradicional andaluz. Hay producto soberbio que se exhibe casi desnudo, elaboraciones "plant based" e incluso una hamburguesa. Fastuosas vistas y un ambiente relajado, diseñado por el prestigioso estudio sueco Martin Brudnizki, para una comida que equilibra la sofisticación con una informalidad alejada de la alta gastronomía. 

Picoteo de relumbrón en las alturas, viaje al Perú más contemporáneo y cosmopolita, cócteles de autor y mucho mucho pisco. Esto es parte de todo lo que ofrece Oroya, la propuesta del chef Diego Muñoz, uno de los últimos rooftop de Madrid, situado en el hotel The Madrid Edition. Tiene una zona exterior espectacular (más orientada al tapeo) y un comedor bajo techo igual de colorista, donde disfrutar de las creaciones con más peso del local.

Inspirado en los aires portuarios de la Marina coruñesa tenemos este rooftop escondido en el céntrico hotel INNSiDE by Meliá Madrid Gran Vía (entrada por calle de Mesonero Romanos 13). Con 500 metros cuadrados, tiene diferentes espacios, desde una gran barra a escenario para eventos, zona de degustación y mesas altas, otra área para disfrutar del ambiente de forma más relajada y hasta una “secret room” con capacidad para 18 comensales que se puede reservar para eventos o comidas privadas.

De las novedades estéticas se ha encargado el estudio del archiconocido Lázaro Rosa-Violán (ha rediseñado los espacios de la terraza inspirándose en el ladrillo de la fachada y en su arquitectura señorial) mientras que la parte gastronómica la firma el chef madrileño Víctor Cuevas, finalista a Cocinero Revelación en Madrid Fusión 2020, que lidera los fogones del BLESS Hotel; es en la carta de Pinzelada Lounge, el restaurante a pie de calle pasado el hall del hotel, donde su propuesta brilla más. 

La azotea del hotel Generator es uno de los secretos mejor guardados de Madrid y a su exclusiva y fascinante terraza se suma ahora una propuesta que pone la guinda al pastel: trae a la capital la famosa coctelería americana Broken Shaker. La premiada coctelería estadounidense es famosa por su innovadora mixología, forma parte de la lista 50 Best Bars de Norte América y ha sido ganadora del premio Best American Hotel Bar Award en Tales of The Cocktail.

En la séptima planta del edificio de SmartRental Collection hay una terraza para todos los cazatesoros en las alturas, para el aficionado del cóctel al atardecer, para el que busca una cena sorpresa íntima. Un espacio que son dos ambientes. Una zona más informal con piscina infinity aclimatada (y suelo móvil para cubrirla) con espectaculares vistas al skyline de Madrid y otra con mesas altas, bajas y sillones para disfrutar de su propuesta gastronómica que se asoma a Gran Vía. 

Después de varios años y muchos cambios de guion, el emblemático Edificio España reabrió de la mano de la cadena hotelera RIU. Cuenta con dos sky bar, que levantan las más admirativas onomatopeyas de turistas y madrileño. Uno, De Madrid al Cielo, ocupa la planta 26 y está ambientado en la Movida madrileña, con luces de neón en sus paredes. Y el otro, situado en la planta más alta del edificio, ofrece vistas 360º a la ciudad y una espectacular pasarela de cristal, que permite caminar literalmente sobre el cielo de Madrid.

Este urbano y vanguardista hotel enclavado en la zona de oficinas de Azca tiene una joya escondida que han llamado Planta Z, abierta a todo el mundo. Aquí se encuentra la animada terraza donde donde podéis disfrutar de un puñado de  platillos street food y beber unos cócteles, un espacio donde siempre está pasando algo (de hecho, de vez en cuando organizan conciertos). Ya para los huéspedes queda la última planta, un rincón con piscina y camas balinesas.

Una terraza 360 grados en la planta 14 de un edificio de Gran Vía, en la confluencia con Plaza de España. Ya solamente por la desconexión que despiertan estas vistas merece la pena acercarse a picar algo o como útil as en la manga para sorprender a alguien reservando aquí una mesa (aconsejamos la visita diurna o dejarse caer antes de la puesta de sol). El interiorismo del restaurante, de líneas elegantes e integrado en el Dear Hotel, lo firma el estudio de Sandra Tarruella. En su carta, de evidente corte actual y para todos los públicos, no faltan croquetas, gyozas, baos o rabas ni contemporáneos platos de pescado y carne.

El restaurante del NH Collection Gran Vía ofrece una de las perspectivas más atractivas de esta arteria de Madrid y, dicho sea de paso, es también de lo poco decente, gastronómicamente hablando, en ella. Azotea Grupo, de nuevo, regenta con Manuel Berganza en los fogones un espacio con una carta cercana, de buen producto y tradición puesta al día, con alternativas como el salmorejo cremoso con helado de idiazábal con polvo de ibérico, los pimientos del piquillo asados al sarmiento con papada ibérica o unos huevos rotos con carabinero de aúpa. Tienen un estupendo brunch sábados y domingos y cócteles, como en todos los negocios del grupo, del reconocido internacionalmente Luca Anastasio.

Algo bueno está pasando en Madrid: cada vez son más las propuestas para disfrutar de las alturas y esta terraza es una de las mejores evidencias. Se trata de Ginkgo Sky Bar, el bar situado en la última planta del hotel VP Plaza de España. Y aunque no está en Gran Vía, su terraza panorámica con piscina ofrece unas vistas espectaculares de todo el cielo de Madrid, desde el palacio Real y la Casa de Campo hasta el barrio de los Austrias y Malasaña.

A un paso del Reina Sofía, en la orilla de Lavapiés, se levantó el primer Hard Rock Hotel urbano de nuestro país (la cadena ya abrió dos resorts playeros en Ibiza y Tenerife hace unos años). Este nuevo espacio, que se suma al creciente panorama hotelero de la ciudad, cuenta con 161 habitaciones y suites repartidas en más 2000 metros cuadrados, incluidos un recogido jardín y una espectacular azotea con panorámicas de 360º.

Otro imprescindible entre los rooftop de Madrid es la popular azotea del centro comercial ABC Serrano (Serrano, 61). El grupo La Fábrica, responsables de Raimunda (en el Palacio de Linares, actual sede de Casa de Amé­rica), está detrás de uno de los 'place to be' de la temporada estival. 700 metros cuadrados de terraza y una zona interior. El nombre rinde homenaje a Torcuato Luca de Tena, porque el palacete donde se ubica el restaurante fue hasta 1989 sede del diario que fundó, el ABC.

270 metros cuadrados entre espacio interior y exterior forman esta azotea de Madrid, convertida ya en un clásico entre quienes no se pierden un rooftop en la capital. Ubicada en la décima planta del hotel Hyatt Centric Gran Via Madrid, tenéis vistas al corazón de Madrid. Una carta muy 'finger food', cócteles de autor y los populares 'sharing cocktails', cócteles servidos en jarras para compartir en grupos, son otros de sus atractivos. ¿A que apetece?

Fuera de la M-30 pero justo pegado a su borde a la altura de Ventas hemos descubierto una tranquila y acogedora terraza que conquistará a todos los cazasecretos en Madrid. Insólito se encuentra en el distrito Ciudad Lineal, a un paso de Arturo Soria, escondido en el interior de Novotel & Ibis Styles. Los atardeceres únicos los pone la ciudad pero ellos despliegan un espacio muy amplío y con piscina que abre todos los días de la semana desde el desayuno.

Los espacios que fueron antes My Way, ahora cambian de nombre para llamarse Ella Sky Bar (Gran Vía, 42). La cocina no es la misma pero sí sus vistas espectaculares que alcanzan desde las Cuatro Torres al norte hasta el más cercano Palacio Real. Y con el legendario neón de Callao, el del edificio Capitol, a una distancia tan corta que hará las delicias de tu cuenta de Instagram. 

A pocos pasos de la mismísima Puerta del Sol se ubica esta azotea donde encontrar desde la tranquilidad para tomar un café a media tarde como para celebrar una cena entre amigos antes de salir a tomar unas copas un fin de semana. Una carta ecléctica con sabores internacionales donde los tequeños, las arepas y el falso ceviche de pulpo convive con la tabla de jamón ibérico y el entrecot de ternera. Echad un vistazo a su carta de cócteles. 

Es la terraza panorámica del H10 Hotel Puerta de Alcalá, y uno de los hits cuando llega el buen tiempo a la capital. Su modesta pero espectacular piscina de metracrilato es capaz de robarle protagonismo a las vistas 360 que se tienen desde esta azotea, situada a un paso de la Puerta de Alcalá y a solo unos metros del parque del Retiro. Tapeo, brunch y cócteles al alcance de cualquiera. Cualquiera que esté dispuesto a ver y dejarse ver, eso sí, que para eso se inventaron los rooftop capitalinos. 

La azotea del Círculo de Bellas Artes es quizás el lugar más famoso para contemplar las mejores vistas de Madrid. Está dividida principalmente en dos espacios, una zona chill out donde recostarse sobre blancas tumbonas y disfrutar de un cóctel, y del restaurante donde cuentan con una variada propuesta de picoteo, comida, cena y cócteles.

Con una visión 360 del skyline de Madrid, La Terraza del Hotel Emperador es el mejor lugar para degustar un  cóctel o disfrutar de un picoteo a la luz de las estrellas. Totalmente climatizada, con una parte cubierta y otra al aire libre, La Terraza del Hotel Emperador mantiene el estilo del prestigioso interiorista Nacho García de Vinuesa para quien la palabra eclecticismo es la que mejor define su trabajo. 

En el recién renovado hotel NH Collection Madrid Suecia, se encuentra esta azotea de increíbles vistas y barra bien surtida. Con dos alturas, podéis contemplar los mejores atardeceres de la ciudad con un cóctel en alguno de sus cómodos sofás. Abre todos los días desde mediodía hasta la una de la madrugada. 

En la calle Montera, a dos pasos de la Puerta del Sol y en pleno centro de Madrid, se esconde un precioso oasis urbano en forma de jardín secreto. Para conocerlo, tendrás que subir hasta la cuarta planta de la tienda Salvador Bachiller, dejando atrás bolsos de piel, maletas y una cafetería interior de aire vintage con cómodas sillas y sofás. Pero si subes hasta la azotea del edificio, hallarás un espacio único y maravilloso. Hortensias de colores, enredaderas, árboles jóvenes y plantas con coloridas flores te darán la bienvenida a un salón de té que parece salido de un cuento. 

Con unas impresionantes vistas hacia el sur de Madrid, el 'rooftop' del hotel Only You Atocha se ha convertido en una terraza de obligada visita. Aquí podéis venir a probar sus deliciosos desayunos, disfrutar de un completo brunch los domingos o tomar una copa mientras contempláis el atardecer sobre la estación de Atocha. ¡Un 'must'!