Petit Lunch by Arzábal

Lo penúltimo (porque no paran de idear y evaluar proyectos) de esta incombustible pareja es una cafetería dentro del generoso espacio que ya tienen en el Museo Reina Sofía. Y es que el arte contemporáneo entra mejor después de un buen desayuno o se digiere y se comenta mejor con una buena tarta y un café sobre la mesa. Pero no se iban a quedar solamente en eso. También sirven ensaladas, bocadillos, hamburguesas, pastas, arroces, pizzas y sopas. Una atractiva colección de platos informales para captar al turista que visita la pinacoteca ahorrándole la tarea de andar buscando sin rumbo definido dónde picar algo con garantías. Pero, vamos, el sello Arzábal asegura “per se” que esta incorporación no es un sitio PARA turistas desprevenidos, también los madrileños sabrán aprovechar esta oportunidad con la que matas dos pájaros de un tiro. Igual que triunfa el binomio cine+palomitas, ahí está el de museo+petit lunch.