Kanimambo

Abdellatif Hwidar, Carla Subirana y Adán Aliaga se reúnen en este film episódico para explicar desde tres prismas diferentes la realidad de un país, Mozambique, a partir de los ojos de sus gentes. Habla de las heridas de la guerra, del papel de la mujer, de la pobreza y los problemas sanitarios y educativos, al mismo tiempo que se erige como una potente metáfora sobre la incomprensión que genera toda su problemática. Los tres realizadores se acercan con humildad a sus historias, centrándose en el poder simbólico de una realidad que va más allá de la ficción. Son minúsculos relatos de supervivencia frente a las condiciones más adversas. Balas dormidas que despiertan y convocan fantasmas, mujeres que trabajan sin descanso y desafían la muerte y una niña sordomuda que lleva en su mirada toda la pena del mundo.