En este museo encontrarás más de 70.000 objetos de arte, muebles y tapices de toda España, además de otros tantos originarios de China. Una de las salas más apreciadas es la cocina de azulejos de la quinta planta, cuidadosamente transferida de un palacio valenciano del siglo XVIII, cuyos 1.604 azulejos pintados representan una escena doméstica, con un grupo de sirvientes preparando chocolate caliente. También es de gran interés la segunda planta, donde se concentran las piezas barrocas españolas, entre ellas cerámica de Talavera y de Teruel, textiles, orfebrería y joyeros del Tesoro del Delfín (el resto de este Tesoro se encuentra en el Prado). Las casas de muñecas y abanicos del siglo XIX, o una cama con dosel del SXVI y una jarra de Sèvres regalo de Napoleón III a la reina Isabel II son objetos que no olvidarás.