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Uno de los mejores personajes que nos ha dado la televisión es George Costanza, el amigo bajito y calvo de Seinfeld. Una de las características más risibles de George era su tacañería, que lo definía como un ser tan despreciable como entrañable. A 'Manual para un tacaño' encontramos otro avaro de tipo: François, un hombre que no quiere gastar un duro, pero que tendrá que abrir su corazón y su bolsillo cuando se enamora de una mujer y cuando descubre que tiene una hija que desconocía. Todo va de tacaños. Aquí, sin embargo, no hay la sátira fina de Molière, ni la irreverencia de 'Seinfeld', sino un humor grosero. En este sentido, no es casual que François esté interpretado por Dany Boon, el hombre detrás de 'Bienvenidos al norte', un actor que siempre nos recuerda que el cine francés no es todo arte y ensayo, sino también humor grueso y sensiblería.