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Este verano las bicicletas eléctricas aumentarán como las temperaturas. Serán varios los operadores pero todos con un denominador común. Las nuevas bicis no tendrán base fija y estarán repartidas en el mapa madrileño de una forma previamente establecida: el interior de la M-30 contará con un máximo de 2.000 mientras que en fuera la cifra alcanzará los 2.800. Las nuevas licencias estarán sujetas a una serie de medidas como que las aplicaciones móviles de estos nuevos vehículos no permitan, en ningún caso, el inicio o finalización de un trayecto en las calles de prioridad peatonal ni en las aceras y espacios peatonales contiguos a los parques históricos como el Retiro o la limpieza diaria y desinfección de todas las bicicletas con sustancias virucidas efectivas frente al Covid-19.
Los ciudadanos dispondremos, tal y como se ha confirmado desde el área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, de un número "tres veces superior a las que existían sólo con el sistema público de bicicletas al término de 2019". Este año podrá haber en nuestras calles hasta 7.764 bicicletas eléctricas.
Estas nuevas autorizaciones temporales para empresas privadas se suman a la ampliación del servicio público de BiciMAD, que arrancó en el verano de 2014 y que en las próximas semanas inaugurará las primeras 50 nuevas estaciones que se implantarán este año en 13 distritos, cinco de ellos nuevos: Carabanchel, Usera, Moratalaz, Latina y Ciudad-Lineal.