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Entre plantas y flores de toda índole y tamaño hemos descubierto un rincón ideal para sentarnos a la mesa y echar la tarde. En un espacio único, bajo una enorme cúpula geodésica de cristal, se puede vivir de primera mano el espíritu que impregna todo lo que hacen desde este importante centro de jardinería. Carta de temporada y mucho producto de km.0 protagonizan una propuesta culinaria que se sirve en vajilla 100% reciclada; la sostenibilidad es otro de los pilares de Los Peñotes.
Ya avisan. No es un rincón para ir con niños pequeños; no disponen de sillas para bebés ni hay hueco para ellas por sus reducidas dimensiones y el menú no es apto para menores de 12 años. Es un lugar para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Sí está abierta a todos su terraza al aire libre, rodeada de estanques de aire japonés y frondosa vegetación. Manda la comida saludable, poco procesada y hay un equilibrado juego entre los entrantes internacionales (gyozas de verduras, ssam de langostino tigre, nigiri de vieras...) y el tono más reconocible e igualmente apetecible de sus platos mayores (magret de pato, picaña de rubia gallega, merluza de pincho...). Hay que coger el coche porque se encuentra en Alcobendas (Camino de Burgos, Salida 12A) pero este verano compensa hacerse este breve viaje para desayunar, comer o cenar (sólo viernes y sábados) en este precioso espacio.
