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La diosa Cibeles será rosa este viernes, 28 de agosto. Como ya ocurriera el año pasado, el castizo monumento se teñirá de este color para concienciar sobre el Síndrome de Turner, una enfermedad rara que afecta a una de cada 2.500 niñas.
El Síndrome de Turner, cuyo origen es genético, afecta únicamente a mujeres. La causa de la enfermedad, que no es hereditaria, es la ausencia total o parcial del cromosoma X. Las niñas que lo presentan suelen tener baja estatura y sus ovarios no funcionan en forma adecuada.
Las afecciones y la intensidad de la enfermedad son variables. Se han detectado casos en los que las zonas afectadas son óseas, coronarias u hormonales. Del mismo modo, los casos extremos han desembocado en discapacidades severas fruto de minusvalías importantes.
Según sus impulsores, la puesta en marcha de este tipo de acciones de concienciación es fundamental de cara a amplificar la información relativa a una enfermedad de la que aún se sabe muy poco. Y es que la detección precoz y la investigación son claves para mejorar la calidad de vida de las pacientes.