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Afortunados los que vivan más alejados de las grandes ciudades. Esta semana llega la noche con la lluvia de estrellas más intensa de las últimas semanas y no es necesario usar un telescopio ni equipos especiales para disfrutarla. Basta acostarse boca arriba y esperar. Desde esa posición la vista del firmamento es mayor. Aunque se observe más fácilmente desde el hemisferio sur o lugares cercanos al ecuador terrestre, el paso del 5 al 6 de mayo será la noche de las Eta Acuáridas.
Originada a partir de la cola del famoso cometa Halley (es, por tanto, una lluvia de meteoritos), su nombre viene determinado porque las estrellas parecen caer de la constelación de Acuario, punto en el que debemos centrar nuestras miradas. Según ha comentado un experto de la NASA, surcarán el cielo hasta 40 estrellas fugaces por hora a una velocidad media de 66 kilómetros por segundo.