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"Excesivo y versátil, polémico y cautivador. El cachopo es idóneo para compartir con amigos y animar nuestros restaurantes en plena pandemia, cumpliendo siempre con las normas y distancia de seguridad", apunta Tomás Gutiérrez, Presidente de Hostelería Madrid y propietario de Pancipelao. El restaurante vallecano (Sierra de Alquife, 26), muy aplaudido por su cocido madrileño, celebra desde el 8 de abril y hasta el domingo 9 de mayo su I Mes del Cachopo.
El chef de la casa, Pepe Filloa, ha versionado el popular bocado asturiano hasta dar con media docena de presentaciones diferentes. Su idea trata rendir homenaje a las regiones del norte (‘Asturias’, ‘Cantábrico’, ‘Clásico’) y del sur (‘Andalucía’), sin olvidarse de pasar por la meseta (‘La Mancha’, ‘Pancipelao’). Solo hay una norma que siempre se cumple: todos sus cachopos llevan una pieza de 250 gr de carne (solomillo, presa, lomo...) y llegan a pesar más de medio kilo.
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