El País de las Maravillas está en el corazón del Tirol: descubrid este viaje inolvidable

Más que un espacio sobre la marca, el Swarovski Kristallwelten (como se conoce en su idioma natal) es una experiencia sensorial que no os podéis perder. Un espacio concebido por André Heller y curado por Carla Rumler en el que se reúnen diferentes expresiones artísticas de diseñadores de renombre internacional. Con más de 7.5 hectáreas, conforma un conjunto de espacios que van mucho más allá de lo ordinario.

El jardín es uno de los lugares más especiales. Conjugando las montañas tirolesas como el horizonte perfecto para este lienzo, arte y naturaleza se fusionan con áreas de juego diseñadas por Snøhetta, la estructura Prologue III y la deslumbrante “Nube de Cristal” formada por 800.000 cristales.

Reservad un buen rato para dar un paseo por el agua reflectante y volver a ser niños gracias a su carrusel en blanco y negro, obra del diseñador español Jaime Hayon, que da la mano a la nostalgia y la modernidad como no hemos visto en ningún otro lugar del mundo. 15 millones de cristales Swarovski crean una atmósfera de ensueño, inspirada en los cuentos de hadas.

De la mano del galardonado artista electrónico Rafael Lozano-Hemmer, las dos nuevas Cámaras de las Maravillas de los Mundos de Cristal de Swarovski son otros de los espacios con los que nunca vais a poder dejar de soñar.

“Kristallstimmen” es todo un retrato sonoro, exclusivo y sobrecogedor, que da voz a las historias jamás contadas por los empleados de la propia casa. 3.000 altavoces de cristal flotantes dan vida a esta inspiradora obra.

No menos espectacular es “Pulse Voronoi”, una instalación biométrica de luz y sonido, funde el arte y la ciencia mediante 7.000 cristales suspendidos que se iluminan con su propio latido.

Por último, no os podéis ir de este fascinante lugar sin descubrir la inspiradora conexión entre Swarovski y Hollywood. En este gran espacio se encuentran joyas de valor incalculable, como atuendos originales de Elton John, Katy Perry o Dita von Teese.

También, réplicas como el “vestido de cumpleaños” de Marilyn Monroe o los accesorios tan emblemáticos de la Meca del cine, como las zapatillas de rubí de Dorothy de El mago de Oz.

Con vistas al esplendoroso jardín, el restaurante Daniels Kristallwelten enamora a los paladares más exigentes con las recetas más encantadoras de la cocina internacional y de temporada.

Si preferís tomar un refresco, en la Kristallbar, dentro de la Tienda Swarovski Kristallwelten, existe esta opción sin necesidad de pagar entrada. Además, este espacio de compras es una de las tiendas de la marca más grandes del mundo y dispone del primer SWAROVSKI OPTIK Store, especializada en óptica de alta precisión.

Este verano, ya tienes una razón más para descubrir la deslumbrante Austria.