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Cada año tenemos diversos fenómenos astronómicos que nos hacen estar pendientes de lo que pasa en el cielo, pero estos días seremos testigos de un hecho único en nuestra vida (literalmente). No se trata de ninguna lluvia de estrellas ni de ninguna superluna, es el paso del famoso cometa verde, bautizado por los expertos como 'C/2022 E3'. La última vez que estuvo tan cerca de la Tierra fue hace 50.000 años, cuando todavía los neandertales vivían en Europa. Su máximo acercamiento a nuestro planeta está previsto para el 1 de febrero, cuando se situará a unos 42 millones de kilómetros. Aquí tienes todo lo que necesitas saber:
¿Qué es un cometa verde?
Los cometas son una combinación de gases, polvo y rocas. A medida que se acercan al Sol, reciben ráfagas de radiación que liberan gases y escombros. No es el cometa en sí, sino la atmósfera que rodea su cabeza -conocida como 'coma'- la que se ilumina de color verde por la reacción del gas carbónico que libera y la luz ultravioleta.
¿Qué tiene de especial este cometa?
Aunque ha habido otros cometas verdes, ahora hablamos de un acontecimiento único en la vida. La última vez que este cometa pasó por la Tierra fue durante la última Edad de Hielo, y no volverá a verse hasta dentro de 50.000 años (cuando reinicie su órbita alrededor del Sol).
¿Cuándo se podrá ver el cometa verde?
Llegó a su punto más cercano al Sol el 12 de enero. Sin embargo, la NASA indicó que no sería visible hasta finales de enero o principios de febrero, cuando estará más cerca de la Tierra de lo que ha estado en 50.000 años. El día que mas se acercara a nuestro planeta será el miércoles 1 de febrero. Estará a unos 42 millones de kilómetros -unas 109 veces la distancia media de la Luna-.
¿Dónde ver el cometa verde?
Según indican desde el Planetario de Madrid en sus redes sociales, las previsiones para ese momento pronostican que su brillo será suficiente como para poder contemplar el cometa a simple vista en el cielo nocturno desde algún lugar con poca o nula contaminación lumínica. Y aunque no es seguro que se pueda ver solo con mirar al cielo, lo ideal sería hacerlo con unos prismáticos de 7x50 o si es posible, con un telescopio. Aquí hay una imagen creada por el Planetario para poder situar la trayectoria del fenómeno y saber a dónde mirar para poder verlo.
Si no tienes ni prismáticos ni telescopios, The Virtual Telescope Project facilita en su página web información e imágenes. Igualmente si quieres hacerte una idea, echa un vistazo a lo que ha captado este usuario de Facebook, colaborador del Planetario de Madrid: