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Durante estos días estamos viendo cómo el sector de la cultura de la Comunidad se está poniendo las pilas para ofrecer de manera virtual piezas teatrales que todos podemos disfrutar desde casa, gratis y sin movernos del sofá. Pero ya hay ganas de volver a sentarse en un patio de butacas (¡y de tantas cosas más!), algo que parece que no va a suceder hasta mediados de junio, tal y como confirmó hace unos días la delegada del Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Andrea Levy. Es decir, después de que Madrid haya llegado a la Fase 2 de la desescalada propuesta por el Gobierno, un escenario previsto inicialmente para el 25 de mayo, aunque el retraso en el cambio de Fase 0 a Fase 1, nos lleva a pensar que los teatros tardarán un poquito más en subir el telón de la fecha prevista por Levy.
La idea era que las salas pudieran reacondicionarse y darles tiempo para adaptarse a unas necesarias medidas de seguridad. De hecho, parece que se está trabajando en la creación de un protocolo de actuación para afrontar la nueva situación de riesgo sanitario con la que vamos a tener que convivir durante los próximos meses y que, presumiblemente, nos va a obligar a disfrutar de los espectáculos del teatro con la mascarilla puesta y una prudente distancia de seguridad entre butacas. Pero eso aún es algo que está pendiente de confirmación.
Mientras tanto, el show continúa en el entorno online, liderado por el Teatro Español y las Naves del Español de Matadero, con su apuesta virtual de El Español en abierto, o la programación de obras de teatro que tanto el Centro Cultural de la Villa Fernando Fernán Gómez o el Centro Cultural Conde Duque están ofreciendo al público, gratis y en abierto, recuperando obras de teatro de temporadas pasadas. Otros, como Teatros del Canal (que mantienen en su web la programación prevista para el mes de junio), han apostado por la Cuarta Sala Canal, su espacio de YouTube contenido online con entrevistas, espectáculos de danza doméstica y otras propuestas de confinamiento a las que ya nos hemos acostumbrado. Porque el show debe continuar.