Cogollos, gramos, polen, hash... no parecen palabras muy adecuadas para mencionar en un lugar público. Mejor dicho, no lo eran hasta que las tiendas de CBD han empezado a florecer como la primavera en Madrid haciendo que el cannabis terapéutico comience a formar parte de nuestro día a día, igual que el paracetamol o el ibuprofeno. Porque, según los expertos, los beneficios del consumo de CBD son bastantes (mejora el estado de ánimo, regula el sueño, calma el estrés...) y, por ahora, no necesitan receta médica. Dicho esto, si te mola y quieres saber qué venden en este tipo de tiendas, y para qué sirve, sigue leyendo, porque os decimos dónde podéis ir a pillar esta marihuana y que no os pongan una multa por consumo.
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Esta tienda engancha, y no nos referimos al efecto del cannabis, sino al de su manera de divulgar y hacer cultura del CBD (con C de calma, B de bienestar, y D de disfrute). Sobre todo de esto último, porque si hay algo que derrochan en esta casa es humor, y la dosis justa de ironía. Lo vemos en sus productos (aceite, cosmética, flores...) con nombres tan divertidos como Roger Cebeder, Cogoyo Jiménez, Amancio Ortiga o Antonio Fresines.
La estética cuidadísima, desde el mobiliario (minimalista y con materiales naturales como la madera) a los colores (blanco y verde salvia) juega a favor de la tienda especializada en CBD Greenery (antes se llamaban Flower Farm). Con un diseño más propio de una boutique de alta joyería que un comercio de cannabis terapéutico. Y quien dice uno dice más de diez, porque ya cuenta con más de una decena de tiendas en Madrid (desde Malasaña a Chamberí, pasando por Atocha y Chamartín) y más de 35 en toda España. En sus estanterías, todo tipo de productos derivados del cáñamo y aptos para un consumo legal. A saber: flores (los típicos cogollos, pero sin apenas THC), cosmética (desde hidratante facila a serum, contorno de ojos, antiarrugas...), vaporizadores para cigarrillos electrónicos y aceite, la estrella de este tipo de comercios. Entre otras cosas, porque se trata del producto de uso tópico (en teoría su consumo sublingual no es legal en España, todavía) más fácil de usar por cualquier persona (las flores son más propias de fumadores).
Algo tiene que tener, además de cáñamo, para que una tienda de cannabis terapéutico esté triunfando entre los vecinos seniors de la zona más clásica y tradicional del barrio de Salamanca. Porque ese es el público mayoritario de CBWeed Retiro, un pequeño comercio dedicado al CBD abierto a un paso del 'central park' madrileño; vecinos mayores que acuden en busca de una cosmética de formulación orgánica (a base de ingredientes de origen natural).
Pineapple, OG Kush, Super Bubba... son los cogollos de flores más vendidos en esta tienda de CBD que triunfa en Madrid. Traen las flores seleccionadas de proveedores europeos, y dicen que solo las mejores "que regalaríamos al mejor de nuestros amigos", como dice su slogan. Tienen más de 10 variedades diferentes (ninguna supera el 0,20% de THC, como marca la ley española) y para los no iniciados, cuentan con un 'tasting pack', compuesto por seis unidades (de 1gr cada una) de diferentes genéticas de flor.
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