Siempre es un buen momentoi para volver a disfrutar, en pantalla grande, de uno de los grandes clásicos del cine de terror. El ciclo Cibeles de Cine proyecta la película dirigida por William Friedkin, en 1973, y que estremeció a varias generaciones. Aún hoy, su visionado resulta inquietante como pocos.
Regan, una niña de doce años, es víctima de fenómenos paranormales como la levitación o la manifestación de una fuerza sobrehumana. Su madre, aterrorizada, tras someter a su hija a múltiples análisis médicos que no ofrecen ningún resultado, acude a un sacerdote con estudios de psiquiatría.