En este diario filmado, tal vez la apuesta más poética de la selección, el belga Eric Pauwels crea una memoria de final de verano de tintes melancólicos. Ahí están las carpas que picotean migas de pan en el lago, el nervio de una hoja seca y ese sol que se mece en el ámbar del cielo. Entre la revelación cotidiana del cine de Jonas Mekas y los cuadernos de David Perlov, todo en esta película tiene una magia íntima que emociona.
Dir. Eric Pauwels.