Time Out en tu buzón de entrada

Buscar
Calle del Oso, Embajadores, Madrid
Photograph: Shutterstock

18 cosas que nos gustaría que siguieran igual que en el confinamiento

Estas últimas semanas hemos descubierto que hay una cuantas cosas que no están tan mal de esta situación

Dani Cabezas
Escrito por
Dani Cabezas
Publicidad

La ansiada desescalada ya ha empezado. Y poco a poco, los madrileños vamos a ir recuperando una normalidad que, aunque aún tardará en llegar, ya se empieza a atisbar en el horizonte. Pese a que todos tenemos ganas de volver a hacer cosas que durante un tiempo no hemos podido hacer, este tiempo confinados también hemos disfrutado de cosas que nos gustaría que se mantuviesen. 

1. El silencio. Ya fuera al bajar la basura, sacar al perro (si vives con uno) o simplemente asomarnos a la ventana, el silencio ha sido la tónica general durante el confinamiento. Y nos encanta. Porque el silencio es calidad de vida. Y no nos vendría mal intentar que reinara un poco más a partir de ahora. 

2. El aire limpio. Los índices de contaminación de la capital han caído hasta niveles nunca vistos. Nunca antes habíamos respirado un aire tan limpio en Madrid.

3. La ausencia de tráfico. Apenas han circulado vehículos privados por las calles, avenidas y carreteras de acceso a la capital, lo que está directamente relacionado con los dos puntos anteriores. Y para qué negarlo: se agradece que las calles estén un poco más libres de coches.  

4. El sonido de los pájaros. Estaban ahí, pero no los percibíamos. Además, la desescalada ha coincidido con el estallido de la primavera y la llegada en masa de especies como mirlos y golondrinas.

5. Pasar más tiempo con la familia. Sí: los más pequeños han sufrido por no poder salir a la calle. Pero al mismo tiempo han podido pasar más tiempo que nunca con sus pares y madres

6. Cocinar más (y mejor). Quien más quien menos ha hecho sus pinitos en la cocina durante este confinamiento. Es el momento de dar un paso más y descubrir nuevos sabores y recetas con los que sorprender a quienes no han disfrutado de tus progresos en los fogones.  

7. El teletrabajo. Muchos empresarios se han dado cuenta de que es perfectamente viable que sus empleados trabajen desde casa. ¿Por qué no implementarlo una vez volvamos a la nueva normalidad? Con el teletrabajo ahorramos en desplazamientos y en atascos, y ganamos tiempo y calidad de vida. 

8. El contacto con los vecinos. A muchos ni les conocíamos más allá del portal o el ascensor. Y sin embargo, ahí estaban. Durante esta crisis hemos estado más cerca que nunca de nuestros vecinos y vecinas, ya fuera con los aplausos de cada día a las 20h o con las redes de apoyo vecinal que se han organizado en todos los barrios. ¿Qué tal si lo mantenemos así?

9. Menos estrés. Cuesta volver a coger el ritmo insano de trabajo al que nos habíamos acostumbrado. Igual lo ideal sería dar con un punto medio en el que todos tenemos un poco más de tiempo para nosotros mismos y hacemos las cosas más despacio. 

10. Las videollamadas con los amigos y familiares. Tomarse un aperitivo de manera virtual ha sido durante estas últimas semanas un deporte nacional. Y aunque nada sustituye al placer de hacerlo en una buena terraza o un restaurante, no estaría de más que siguiéramos haciéndolo, al menos con aquellos amigos o familiares a los que no vemos tan a menudo, 

11. El ejercicio en casa. Los vídeos con rutinas de ejercicio han multiplicado sus visitas. Es obvio que siempre es mejor sentir el aire en la cara mientras corres, pedaleas o practicas tu deporte favorito, pero no estaría de más mantener las buenas costumbres y alternar ese deporte al aire libre con una buena sesión en casa. 

12. Los aplausos a los sanitarios. Igual no es necesario que, cuando todo esto pase, sigamos aplaudiendo cada día a las 20 al ritmo de 'Resistiré'. Pero sí que sigamos poniendo en valor el trabajo de los profesionales sanitarios, auténticos héroes y heroínas de esta crisis. 

13. Streaming gratis. Muchas compañías audiovisuales de entretenimiento han abierto la mano para hacernos el confinamiento un poco más ameno con emisiones. Sabemos que es mucho pedir, pero... ¿podrían alargarlo un poco más? ¡Gracias!

14. Conciertos desde casa. Ante la imposibilidad de disfrutar de la música en vivo, los artistas han compartido un sinfín de actuaciones desde el salón de su casa. Es cierto que nada puede compararse a la sensación de cantar a voz en grito con otros centenares de fans en un sala, pero para qué negarlo: la intimidad de los conciertos online también tiene su encanto. 

15. Arte a un clic. Ya lo hacían instituciones como el Museo del Prado, pero con este confinamiento se han multiplicado las pinacotecas, galerías y centros de exposiciones que han apostado por compartir sus obras de forma virtual. Una opción fantástica que debería mantenerse y seguir mejorando cuando todo esto termine.

16. Descuidarnos un poco. No hablamos de no pasar por la ducha y oler mal, sino del inenarrable placer de no tener que cumplir con algunas normas que, reconozcámoslo, son impuestas por la sociedad que vivimos. Nos gusta estar despeinados, en pijama, sin sujetador y sin preocuparnos del qué dirán. 

17. La higiene. No: esto no se contradice con el punto anterior. A pesar de haber descuidado un poco nuestro aspecto, nos estamos lavando las manos más que nunca. Y eso es bueno. ¿Qué tal si lo mantenemos para evitar futuros virus? 

18. No hacer lo que no nos apetece. Hay que reconocer que a veces vamos a sitios por pura inercia. A partir de ahora, bastará un sólo argumento para hacer otro plan o simplemente quedarse en casa: "hay demasiada gente". 

Últimas noticias

    Publicidad