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En la última y cada más mediática lista de The World's 50 Best Restaurants, coronada por Central (Lima) y con DiverXO en el tercer puesto, el restaurante mexicano que nos visita (de manera muy muy fugaz), tras dos décadas de trayectoria en Ciudad de México, apareció en el casilla 13. Contra todas las supersticiones ellos traen su legendario mole madre. Puro umami, honda receta. Pero ese será uno de los distintos pases del menú cerrado que trae el famoso Pujol al centro de Madrid, a la misma plaza de las Descalzas, al fabuloso hotel The Madrid Edition, donde se esconde también uno de nuestros bares secretos favoritos.
En la sala y en las cocinas de Jerónimo, con Cristian Gaona al frente en el día a día, se instala durante dos noches el equipo, liderado por Jesús Durón, del prestigioso chef Enrique Olvera. El lado más contemporáneo y mundialmente reconocido de la cocina mexicana se instala los días 5 y 6 de octubre en la capital. Solo serán dos veladas porque el menú, que aúna sabores auténticos, producto de uno y otro lado del Atlántico y elaboraciones sorprendentes, se servirá únicamente durante el servicio de noche. ¿Su precio? 120 euros por comensal.
¿Qué platos componen el menú de Pujol en Madrid?
Para los que no quieren sorpresas... Allá van todos los pases para las dos noches:
Botanas:
-Delicados elotes baby acompañados de una mayonesa especial de chicatanas, chiles costeños y un toque de café.
-Chicharrones de kale sazonados con hierbas silvestres frescas y el toque cítrico de la lima finger.
-Una tostada crujiente con salpicón de almejas navajas, un homenaje al mar con sabores vibrantes.
Platos principales:
-Ceviche de sepia, aderezado con la refrescante leche de tigre de cactus y la cremosidad del aguacate.
-Un carabinero preparado al estilo mexicano con ingredientes frescos y picantes que dan vida a este manjar del mar.
-Un lenguado Dover con la intensidad de los sabores de México, acompañado de esquites, berberechos y ejotes en una salsa aromática de epazote.
-Un mixiote que rinde homenaje a la carne de res rubia gallega, cocida lentamente.
-Mole madre y un mole nuevo que se complementan perfectamente.
Postre:
-Una dulce despedida a la velada, donde las fresas frescas se unen a la riqueza de la crema eggnog en un postre que celebra la fusión de sabores.