Joan Fontcuberta llamaba "espera latente" el lapso que separa el instante en que se dispara el obturador de una cámara del momento en que la imagen capturada, previo paso por el laboratorio, toma cuerpo material. Lo digo en pasado porque la fotografía digital ha suprimido este concepto.
El futuro director de cine Carlos Saura se empezó a dedicarse profesionalmente a la fotografía en 1951. Poco después recorrería España con la idea de publicar un gran fresco espiritual del país que apenas había sobrevivido a una guerra civil. Como tenía pocos medios aprovechaba los clics: de un carrito de 36 fotografías extraía hasta 20 imágenes ampliables. Saura reveló los negativos pero no los positivó... hasta el año 2000. Fue entonces cuando se decidió a escanear los negativos y imprimirlos con un 'plotter'.
De este medio siglo de latencia salió una exposición que pudimos ver en Círculo del Arte y que actualmente itera con motivo de la publicación del libro 'España años 50'... No. El tiempo no pasa. Pasamos nosotros. Como sombras latentes.
El futuro director de cine Carlos Saura se empezó a dedicarse profesionalmente a la fotografía en 1951. Poco después recorrería España con la idea de publicar un gran fresco espiritual del país que apenas había sobrevivido a una guerra civil. Como tenía pocos medios aprovechaba los clics: de un carrito de 36 fotografías extraía hasta 20 imágenes ampliables. Saura reveló los negativos pero no los positivó... hasta el año 2000. Fue entonces cuando se decidió a escanear los negativos y imprimirlos con un 'plotter'.
De este medio siglo de latencia salió una exposición que pudimos ver en Círculo del Arte y que actualmente itera con motivo de la publicación del libro 'España años 50'... No. El tiempo no pasa. Pasamos nosotros. Como sombras latentes.