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[title]Durante la primavera, proliferan festivales de todos los colores, pero hay uno que nos entra por la vista desde hace once años. El Screen Festival, la cita con el videoarte más importante de Europa, despliega su propuesta y transforma la ciudad en el hábitat idóneo para la exhibición de videocreaciones. Con un programa de más de 100 exposiciones, charlas, performances, proyecciones y rutas comisariazas repartidas por 70 espacios, entre museos, fundaciones, galerías, restaurantes y librerías, el Screen ofrece un recorrido en random por el arte de la imagen en movimiento.
El festival abasta desde las primeras creaciones de los sesenta, con las instalaciones experimentales de Nam June Paik -considerado el padre putativo del vídeoarte -, algunas de las cuales se pueden ver en 'This is not a love Song' (Palau de la Virreina) juntamente con piezas de Andy Warhol o Douglas Gordon, hasta las propuestas más actuales, como 'Parade', de Hans Op de Beeck (Cercle del Liceu) o el vídeo giratorio 'Tierra sin males', de Susan Kleinberg (Casa Batlló). Durante diez días, acoge cerca de 500 obras de 350 artistas, expande las prácticas creativas audiovisuales y deja exposiciones colaterales que se alargan unos meses, como el caso de la imperdible 'Haute fidélite' (Arts Santa Mònica), con Bill Viola, Marcel Broodthaers y John Cage, o 'Pasolini Roma' (CCCB) -no sólo para cinéfilos - que estudia cómo el artista construyó un nuevo imaginario de la capital italiana.
Paralelamente, la feria Loop ofrece unos cuarenta vídeos que se proyectan, como empieza a ser tradición, en diferentes habitaciones del Hotel Catalonia Ramblas. El videoarte vive una luna de miel con Barcelona y esta relación apasionada se hace patente también este año, en el que se enfoca la relación entre la música y la imagen y las implicaciones políticas y poéticas del arte. Loop Studies programa una serie de encuentros con músicos, cineastas, escritores e investigadores para indagar sobre nuevos modelos de producción y creación, y MiniScreen aproxima el arte contemporáneo a los niños.
Justo cuando florecía este movimiento, David Ross, especialista en videocreación y conservador, pronosticó que "igual que el collage desbancó a la pintura al óleo, el tubo de rayos catódicos sustituirá al lienzo". Han pasado unas décadas y todo apunta a que las diferentes técnicas conviven pacíficamente, se retroalimentas y se complementan, pero chi lo sa, que diría el cineasta italiano, los caminos del videoarte son inescrutables...