[title]
La leyenda decía que los ordenadores y dispositivos Mac no podían tener virus y 2015 fue el año en que se derrumbó este mito. Ahora también sabemos que un peligroso virus ha llegado a Mac: KeRanger, el secuestrador de archivos. Se trata de un programa (o software) con muy mala fe, premeditación y maldad. Un software que tiene como objetivo infiltrarse en un dispositivo electrónico y, vulgarmente dicho, hacerle mucho daño. Un 'badware', que es como se conoce en el lenguaje técnico, que lo que hace es bloquear el acceso de los usuarios a determinados archivos y programas y pedir un rescate para poder volver a acceder a ellos. Un secuestro en toda regla que se ha convertido en la última técnica de los 'hackers' para amargarnos la vida.
Todo comenzó hace un par de semanas, cuando expertos informáticos alertaban del peligro de estos 'badware' y ahora se han confirmado los primeros casos de KeRanger en los hasta hace poco invulnerables Mac / OS X. El KeRanger se instala en el ordenador a través de algunos clientes de Torrent, que es el canal de transmisión del virus hasta el ordenador. Más concretamente, los primeros casos se han instalado a través del cliente de BitTorrent de código abierto Transmission. El usuario se descargaba el programa a través de BitTorrent, de manera legal y oficial, y una vez hecho el virus comenzaba a secuestrar archivos y pedir un rescate de unos 375 € por ellos. Y además, el virus se conectaba (o se conecta, porque esto no ha hecho más que empezar) a través de una red, Tor, que impide que se puedan seguir las conexiones. Es decir, mantiene el anonimato del hacker.
Tanto Apple como Transmission han actuado con rapidez para solucionar el problema: Transmision ha eliminado el programa infectado y Apple el certificado para instalarlo, y desde Palo Alto Networks han explicado cómo borrar KeRanger en caso de infección. En todo caso, estamos ante un precedente muy preocupante, ya que es muy difícil controlar y sobre todo encontrar a los culpables de estos ataques, que ahora ya tienen a los dispositivos Mac en el punto de mira. ¡Ojo!