Top 20 de Sitges 2016

En Sitges siempre existe el riesgo que te salga un zombie de detrás de un arbusto y te meta un mordisco en la nalga. Así que preparemos el terreno. Los amantes del cine de infectados no se pueden perder esta cinta surcoreana de terror apocalíptico que empieza con una mujer que corre por un andén, con un mordisco en la pierna, a punto de subirse a un tren en marcha, mientras un virus se le aferra a la carne.

El sexo siempre ha sido uno de los tentáculos del cine de terror. El año pasado, por ejemplo, vimos 'Love', la película porno en 3D de Gaspar Noé. Y este año la cuota picante queda cubierta con este título de Park Chan-Wook, el director de 'Oldboy' y 'Stoker', una de las perlas que van a competición. Trata de la relación lúbrica y con toques fetichistas entre una señora y su criada.

Le dedicaron la edición de 2015 a 'Seven', el 'serial killer' de los siete pecados capitales, y este año por Sitges desfilarán un montón de asesinos difíciles de conformar. El primero de todos es japonés y solo ataca los días de lluvia, con una máscara de rana bajo la cual camufla su identidad. Keishi Ohtomo dirige una película sanguinaria que os pondrá el estómago por corbata cada vez que el cielo se ponga gris.

Una de las apuestas de terror que más nos devorarán las uñas es esta especie de homenaje a los clásicos de John Carpenter, perfecto para todas aquellas almas ochenteras que os criasteis leyendo a Stephen King y adorando los escarabajos diabólicos de 'El príncipe de las tinieblas'. Va de un policía que lleva a un hombre herido a un hospital regentado por esqueletos encapuchados como si fueran miembros del Ku Klux Klan.

Desde su estreno en Cannes, la nueva película de Nicolas Winding Refn se ha ganado más detractores que fans. Y aún así, cuando la ves te dan ganas de levantarte de la butaca e ir a chupar la pantalla. Esta orgía de terror húmedo está ambientada en una escuela de modelos que bien podría haber salido de uno de aquellos 'giallos' que Mario Bava dirigía en los años 60. El director de 'Drive' construye un infierno de alta costura, con Elle Fanning de protagonista, donde la sangre se confunde con purpurina brillante.

Esta va de un monstruo grande como un cachalote y más peligroso que aquella bestia de escamas blancas que salía en 'Jurassic world'. Nacho Vigalondo, a quien recordaréis por películas como 'Los cronocrímenes', nos presenta un film de género que él describe como una mezcla entre 'Lost in translation' y 'Godzilla'. Lo protagoniza Anne Hathaway, y va de un animal de dimensiones brontosáuricas que destruye la ciudad de Seúl.

No sé bien en qué momento se ha producido la alineación de astros que ha dado lugar a esta película. Os podemos decir que se trata de un 'thriller' sexual obsesivo y perverso dirigido por Wayne Wang, el hombre que hizo 'Smoke' a partir de un guión de Paul Auster. Os podemos decir que es la adaptación de un relato del madrileño Javier Marías, que pasa entre las habitaciones de un hotel con sábanas blancas, y trata el tema del voyeurismo'. Y os podemos decir que el protagonista es Takeshi Kitano, cineasta, cómico y manzai. Yo no me la perdería.

Es otro de los asesinos en serie que nos propone el festival. Rodrigo Sorogoyen, conocido por títulos como 'Stockholm' y '8 citas', nos ofrece una película de ritmo trepidante y con mucho gancho, ambientada en el Madrid del 15-M, que tiene por protagonistas a Antonio de la Torre y Roberto Álamo. Con chalecos antibalas y pistolas reglamentarias, serán los responsables de una investigación policial para acabar con una cadena de homicidios.

Dedicada con todo nuestro corazón a los amantes de la serie B. Rob Zombie, aquel cantante de metal con el pelo quemado con agua oxigenada y camisetas de los Ramones, vuelve a pisar la alfombra roja de Sitges con un film atroz que tiene la forma de un tributo a los 'slashers' clásicos. El director de 'La casa de los 1000 cadáveres' y 'The devil's rejects' crea una monstruosa liga de payasos deformes y carnívoros que salpicarán vuestra vida de bilis y riñón.

Uno de los invitados con más solera del festival de este año es Paul Schrader, aquel señor que dirigió a Richard Gere en 'American gigolo' cuando todavía no tenía canas. Su nueva película es un 'film noir' con todas las de la ley, con Nicolas Cage y Willem Dafoe. Se pudo ver en Cannes hace unos meses y teñirá Sitges con su ambiente noctámbulo de asfalto húmedo y rótulos luminosos.

Quizá pensáis que no tenemos escrúpulos, que Sitges es un festival para degenerados con el estómago lleno de malos sentimientos. Pero estáis equivocados. Este año tenemos algunas historias de amor un poco especialitas que satisfarán a los corazones románticos. Como esta, que va de un joven invisible que se enamora de una chica ciega. Hay quien la ha comparado con el clásico de Charles Chaplin 'Luces de la ciudad'. Aunque allí no había ningún fenómeno paranormal.

Este año hará 50 que Gene Roddenberry inauguró la franquicia 'Star Trek', uno de los fenómenos más prolíficos de la cultura popular, con trece películas, diversos programas de televisión y una factoría de fanáticos que crece cada lustro. El festival de Sitges le dedica su cartel, y un montón de actividades vinculadas a esta fantasía galáctica inmortal. Entre ellas, está la proyección de un documental dirigido por el hijo del añorado Leonard Nimoy, el mítico Spock. Larga vida y prosperidad.

Os he prometido unas cuantas historias de amor. La de Spock podría entrar en la selección. Pero, lo confieso, todavía estoy más impaciente por ver esta ida de olla colorida, con una estética entre la 'Familia Addams' y un producto de bazar chino, que va de un hombre y una mujer que comparten una afición fisiológica: se alimentan solo de pelo. Pelos de perro, cola de potro, bigote, sobaco y moqueta. Es, propiamente, una comida ligera.

Hagamos memoria. Hace cuatro años que en Sitges vimos 'Turistas', una genial comedia inglesa de Ben Wheatley con la plantilla de 'Little Britain', en la que había un perro que moría empalado con una aguja de tejer. Su protagonista, Alice Lowe, vuelve a pisar el Garraf con su primera película como directora, otra cinta de humor absurdo sobre una mujer embarazadísima que reclama que se vierta sangre. Os hará saltar sobre la butaca, y aullar de felicidad.

Os hemos prometido carne podrida, y carne podrida tendréis. Una de las rarezas más anunciadas de este año es la última película de Daniel Radcliffe, el niño prodigio que hizo de Harry Potter. Trata de la amistad entre un náufrago a la deriva y un cadáver reblandecido por el agua y en proceso de descomposición. Suena a una versión necrófila de 'El viejo y el mar' de Hemingway, ¿verdad?

Hemos escuchado crujir la tierra. Las criaturas del subsuelo están saliendo de sus sepulcros y ya asoman la cabeza entre las raíces. La mítica saga de Don Coscarelli ha dado a luz a una nueva película, un retorno al cementerio de Morningside donde parece que Lucifer ha puesto sus huevos de serpiente. Hay unos bichos diabólicos, que vienen de una dimensión desconocida, y una esfera de acero a quien ni la roca de Indiana Jones podría plantar cara. Será la tralla.

La animación, sobre todo el 'anime' japonés, tiene un feudo tradicional en Sitges. Este año hay dos producciones que despuntan como los dos colmillos de un vampiro hambriento. Una es 'Gantz: 0', espectacular adaptación para la gran pantalla del hiperviolento manga homónimo. Pero a nosotros, que cada vez que vemos un infectado tenemos ganas de llevárnoslo a casa y darle sopita, todavía nos apetece más 'Seoul station', una especie de secuela animada de 'Train to Busan', que tenéis en el número 1 de esta lista.

Aquí tenéis una pesadilla vírica de las que te ponen la piel del revés. Que nos la hayamos guardado para las últimas posiciones no le quita mérito. Esta joyita surcoreana de género sembró el pánico en Cannes y ahora descarga en Sitges como la plaga de langostas en el dormitorio de Ramsés. Y arranca, al más puro estilo del 'western' clásico, cuando un extraño 'cowboy' asiático llega a una pequeña comunidad, en el mismo momento en el cual una enfermedad infecciosa empieza a cobrarse las primeras víctimas mortales.

Si algo nos enseñaron los cuentos infantiles es que si entras en una cabaña solitaria en medio del bosque lo mínimo que te puede pasar es que se te coma un lobo con camisón. En esta división, os recomendamos una producción mexicana de lo más perturbadora, obra de Amat Escalante, que recibió el premio al mejor director en el festival de Venecia. Un cóctel de terror con matices gore, que se puede leer como una alegoría social donde se mezclan conceptos como la homofobia y la misoginia.

Es la cinta que se pasará en la sesión de clausura, y justamente por eso me la he guardado para el final. Es una producción británica dirigida por el español Juan Carlos Medina, que tiene lugar entre las nieblas industriales de Londres durante la época victoriana, y nos explica una historia que está a medio camino entre 'Los crímenes de la calle Morgan' de Poe y el expediente de Jack el Destripador. Al grano, hay una serie de asesinatos que parecen cometidos por una criatura con fuerzas sobrehumanas.