12 ideas para entrar en el agua y no salir

Cuando entras en PortAventura Park puedes escoger tu aventura: ¿quieres pasar un rato en el Far West? ¿O prefieres pasearte por la China o Polynesia? Este fue el primer parque temático de España y actualmente tiene más de 5 km de montañas rusas y un sinfín de atracciones. Seguro que os sonarán el Tutuki Splash, el Furius baco, el Dragon Khan o el Shambhala, la montaña rusa más alta del parque.

Bebés, niños y madres embarazadas. Penguins Barcelona es un espacio pensado para los tres. Piscina, ludoteca, una zona de cafetería con mamparas con vistas al agua, una sala para actividades psicomotrices... El agua da a los pequeños una libertad total de movimientos y se puede convertir en la herramienta ideal para despertar su creatividad y colaborar en su desarrollo cognitivo, psicomotor y emocional. Han viajado hasta Suecia, Dinamarca o Estados Unidos para aprender de los mejores y llevar hasta Barcelona unos métodos basados ​​en el juego y la imaginación y donde el bebé siempre está activo y el profesor en el agua. ¿Imprescindible? Que el niño se lo pase bien mientras trabaja la flotabilidad, la respiración y la propulsión. Dividen los grupos por edades, de 0 a 3, de 2 a 3 y de 3 a 7 y con los más pequeños, los padres también se meten en el agua y son un alumno más. Además, en Penguins Barcelona también nos han descubierto el método AIPAP, en el que trabajan con mujeres embarazadas para mejorar su condición física y la movilidad de sus articulaciones.

Una piscina indoor... ¡con bicicletas dentro! No nos hemos vuelto locos. Aqua Body Studio es un centro de entrenamiento personalizado ubicado junto a Arc de Triomf que apuesta por el Aquabiking: como el tradicional spinning pero en el agua. Si estáis pensando en tonificar glúteos, quemar calorías o luchar contra la piel de naranja is ‘the place to be’. Combina los beneficios de la bicicleta y la gimnasia acuática en unas sesiones dinámicas de 45 minutos donde se trabaja no sólo el tren inferior, sino también el superior: con ejercicios sobre la bici y fuera, calentamiento, fase de aceleración y estiramientos. Podréis probar una clase por 10 euros y, después, dejar que os dé el sol en la terraza del centro. Nos dicen que al día siguiente... ¡cero agujetas!

En el centro del parque natural de Collserola, en un entorno único, se ubica el Club Tenis Sant Gervasi (Can Marles, s / n). Prácticamente en el techo de Barcelona, ​​se respira tranquilidad y es el refugio perfecto para esconderse del ritmo de la ciudad y… remojarse. Cuenta con una piscina exterior con sillas, hamacas y un espacio de césped perfecto para tumbarse al sol. La entrada de día de un adulto sale por sólo 6 euros entre semana y 8 los sábados y domingos pero los pequeños no pagan hasta los 16 años.

Si no tenéis tiempo ni ganas de iros lejos de Barcelona pero preferís no quedaros en la arena de nuestra ciudad, coged el tren y plantaos, en menos de media hora, en Badalona. Cerca de la estación, os queda una de las playas con más personalidad de la zona: la del Pont del Petroli. Su encanto se lo gana gracias a la escultura del mono, el puente que le da nombre y la mítica fábrica de Anís del Mono. Os bañaréis sin olvidar el espíritu fabril de la ciudad vecina.

¡10 euros! Es el precio de la entrada de día en este macrocomplejo deportivo universitario. Si os gastáis un billete de diez, podréis bañaros en una piscina que viene con una 'playa' de 650 m2 incluida: una zona donde tumbarse en sillas y hamacas y con sombrillas. Cubierta en invierno y descubierta en verano, el agua de los Esports UB cumple a la perfección con sus dos papeles: el de piscina para entrenar y para divertirse.

Increíble pero cierto. En pleno Eixample barcelonés, donde abundan las oficinas, se esconde un DiR Seven que viene... ¡con dos piscinas! Una interior y otra exterior. No son excesivamente grandes pero se agradece –mucho– que estén. Nosotros somos muy de la exterior, de 7 metros y perfecta para olvidar reuniones y trabajo que todavía queda por hacer metiendo la cabeza y dejándose llevar por el movimiento del agua. Con hamacas por los alrededores, en verano, también hay una terraza del restaurante Saibó donde comer después de darse un buen chapuzón.

La ciudad vecina tiene mucho para ofrecer. Está a un golpe de metro y tiene una piscina municipal de escándalo donde una entrada de adulto sale por 7,20. Eso sí, si tenéis claro que haréis más de un día de agua... mirad la opción de abono por 10 servicios: sale a 55,80 euros. ¿Sabéis qué? Esta piscina descubierta es de agua caliente casi todo el año: entre el 1 de enero y el 31 de mayo y el 1 de septiembre y el 27 de diciembre. Perfecta para remojarnos al aire libre en invierno sin sufrir por el frío.

Shhhh. Guardadles el secreto. Cuando llega el buen tiempo, los vecinos de Vallbona y de Montcada se bañan aunque la normativa lo prohíbe. La antigua costumbre de remojarse en el canal todavía está viva y grandes y pequeños llevan muchos años poniendo los pies en el Rec Comtal y, hasta ahora, las autoridades solían hacer la vista gorda. El baño lúdico en este canal medieval que transcurre al aire libre es objeto de debate, así que si os acercáis a poner los pies, hacedlo con respeto, con cuidado y bajo vuestra responsabilidad.

Es la típica excursión que hacemos los domingueros con el cole: un día de multiaventura en el Canal. Si buscáis las aguas más tradicionales las encontraréis en la piscina: abierta al público, os costará entre 7 y 8 euros bañaros en ella y, después, tendréis libertad para descansar en las hamacas y en el césped que hay por los alrededores. Eso sí, también podréis remojaros mientras hacéis SUP, kayak o dais un paseo en patín y avanzáis por las aguas del canal más famoso de Castelldefels.