Yoga para corredores

Ricard trabaja desde su propia experiencia porque él ha hecho montaña toda la vida y ha participado en maratones e incluso en pruebas como la mítica OCC del Mont Blanc: "Descubrí todo lo que sacaba del yoga y me fue muy bien, y más en largas distancias. Sin ser un gran corredor ni entrenar muchísimo, siento y sé que si he podido hacer estas carreras no es sólo por entrenar muchas horas sino por complementarlo con herramientas como el yoga. Gracias a esta disciplina he tomado conciencia del cuerpo, de cómo lo muevo y de cómo ahorrar energía". En las sesiones se trabaja según el Hatha Yoga y, para Sarrate, el principal beneficio es que ayudan a aprender a correr en total armonía con nuestro cuerpo. "Mejoras flexibilidad, elasticidad y equilibrio; disminuyes la tensión y la rigidez muscular, reduces el riesgo de lesiones y los dolores de la columna lumbar; aumentas la capacidad muscular y mejoras el ritmo cardiorespiratorio...". De hecho, el yoga nos conecta con nuestro cuerpo, nos ayuda a conocernos al máximo y, esto se traduce en una capacidad para saber qué músculos debemos tener activos al correr y cuales podemos relajar. ¿El resultado? ¡Un ahorro de energía brutal!

Cuando pensamos en el yoga, las primeras palabras que nos vienen a la cabeza son posturas y... ¡respiración! Durante la sesión de yoga que hacemos en el Espai Karuna, Ricard incide en trabajarla y en aprender a coordinar cada movimiento con inspiraciones y expiraciones. "A la hora de correr, también es vital". Al encontrarnos a principio de curso y ser nuestra primera sesión, Sarrate nos guía a través de posturas poco complicadas y nos recuerda que más que forzar, lo importante es sentir que trabajamos y encontrar la comodidad en la asana que estemos practicando. "Como cuando corres, debes disfrutarlo también".

Ricard hizo sus primeras clases de yoga para corredores en la tienda de Evasion Running pero desde hace un tiempo, el Espacio Karuna, fundado por su madre, es su sala de trabajo. Las sesiones específicas para deportistas se hacen los jueves a las 19.30 h y algunos de los alumnos más fieles hace cerca de tres años que trabajan a su lado. "Raul hace mucho tiempo que es un fijo. Hacía carreras de 10 kilómetros y comenzó a mejorar sus tiempos, participó en medias y, también, en una maratón. Hace ilusión cuando comparten un objetivo contigo y ves como crecen a tu lado", dice Sarrate. También, ha dado clases abiertas en el Parc de la Ciutadella o talleres intensivos y lo visitaron durante un tiempo un grupo de ‘barefoot runners’ –que corren descalzos– con los que la filosofía del yoga y de sentir el cuerpo conjugaba al 100%. Son muchos, además, los deportistas profesionales que también se reconocen como yoguis: como Emelie Forsberg o Anna Frost, dos de las mejores corredoras del mundo de trail running.

¿Qué os ha llevado a correr? ¿Y a hacer yoga? La voluntad de evadiros del estrés. Es probable. Muchos picamos a la puerta de ambas prácticas para sentirnos, observarnos, reconectar... Ricard ayuda a sus alumnos a recordar que deben centrarse en el momento presente, y les enseña a hacer visualizaciones de tiempo o recorridos durante las clases de yoga y de asanas cuando corren. Todo para mejorar el rendimiento pero, sobre todo, para disfrutar y encontrar la armonía. "Correr es meditar en movimiento". Sarrate dixit.

Barcelona es tierra de runners y yoguis y, además del Espacio Karuna, también hay otros centros que organizan o han programado sesiones especiales de esta práctica milenaria especialmente pensadas para corredores: Yoga Weeks, La Bolsa del Corredor vía T de Terapia, Postural Fitness o Mujer 10, donde hacen sesiones de pilates pensadas para los que lo pasan bien sumando kilómetros.