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[title]Alex Scally, mitad de Beach House, me pregunta qué tal desde el otro lado del teléfono; él está en Baltimore, donde el dúo dream pop -expandido a trío en directo- vive y trabaja. ¿Lo preguntas por algo en particular o es sólo por dar conversación?, le lanzo. No, por nada -dice-, somos humanos y nos comunicamos, ¿no?, y me siento una maleducada por ir tan al grano. El dúo tiene fama de ser poco amante de la promoción y la amabilidad de Scally me pilla por sorpresa. Además, sólo tenemos 20 minutos -Beach House han conseguido el estatus en el cual el tiempo que te pueden dedicar está cronometrado por un publicista - y tenemos mucho de que hablar, de los dos conciertos que harán en la Apolo, con las entradas agotadas a pesar de haber tocado en el último Primavera Sound, y del precioso vídeo que acaban de publicar online, 'Forever still', donde interpretan en directo sólo para los paisajes tejanos de Tornillo cuatro temas del cuarto álbum 'Bloom' (2012), entre la puesta y la salida del sol.
En Barcelona tuvimos la suerte de ver a Beach House justo antes de que estallaran con 'Teen dream' (2010), en el Primavera Club 2009, en salas de pequeño aforo como La [2] de la Apolo y Sidecar. El pelo de Victoria Legrand ondulaba al ritmo de la música, y el poder del directo del dúo era increíble en las distancias cortas. Una emoción que no he sentido en sus posteriores directos en el forum en las ediciones del 2010 y 2012 del Primavera Sound. "No es fácil llegar a la gente de la misma manera que podíamos hacerlo en salas más pequeñas -admite Scally-. Nos tenemos que esforzar y debemos verter mucha más energía. Tocar en un recinto grande puede ser fabuloso, a veces hemos creado una energía que nunca fuimos capaces de generar en una sala pequeña. Pero a veces es como si el gran recinto estuviera vacío".
Arte por el arte
Beach House no es un grupo que intelectualice su proceso artístico. Su divisa es el arte por el arte, y aunque son conscientes que lo pueden hacer porque en el otro lado hay alguien que escucha, no crean pensando en el público. "La música es genial porque la puedes compartir, pero no la hacemos sólo para los otros. Surge de mí y después la entrego a la gente, pero no pienso en ello hasta que llega el momento de entregárosla -reconoce-. Claro que queremos que a la gente le gusten nuestros discos, porque querrá decir que podremos salir de gira y ganarnos la vida, pero no pensamos en los otros cuando hacemos música. Es destructivo. Nos acabarían saliendo canciones como 'Hit me with your best shot'", y para que me quede claro a qué se refiere, no vaya a ser que yo no relacionara el título con la canción, canta el estribillo del éxito de los 80, y como le río la gracia, continúa.
Beach House quieren ser, por encima de todo, honestos con ellos mismos. Y aunque con 'Forever still' no han querido demostrar nada, en la declaración que acompaña al vídeo queda claro que, en cierto modo, también es una reacción a lo que llaman la "cultura del contenido", con la que los medios de comunicación fuerzan a los grupos a crear con prisas contenidos inéditos: acústicos, sesiones de DJ, etc. Scally lo tiene claro: "Creo que la gente sólo tendría que hacer cosas que le importaran de verdad y poner toda la energía de la que son capaces. Nosotros también hemos formado parte, pero ya hay demasiados contenidos en Internet que no son dignos de tu tiempo. No queremos hacer cosas en las que no podemos dar lo mejor de nosotros".