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Helena Miquel
@Maria DiasHelena Miquel

La aventura definitiva de Helena Miquel

La cantante se lanza en solitario con un primer trabajo, 'El sol en la sombra', donde se desnuda emocionalmente

Escrito por
Jordi Garrigós
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Nos hemos acostumbrado a ver a Helena Miquel sobre el escenario durante tantos años, que no se hace raro imaginarla sin una banda detrás. Por fin debuta a solas con 'El sol en la sombra'.

Después de muchos años de carrera ahora irás en solitario.
Helena Miquel: Siempre había tenido gente en mi círculo que me animaba a dar el paso, pero me hacía demasiado respeto ir sola. Nunca me he considerado una buena instrumentista, y me parecía que no tenía bastante conocimiento para ponerme a hacer canciones. Hice algunas por encargo y a raíz de esos temas empezaron a salirme cosas con la guitarra. Entonces vi que tenía la necesidad de explicar cosas que tenía adentro.

¡Y de aquí a sacar un disco!
El primer impulso me lo dio Marc Marès, guitarrista de Élena, fue la persona con quién tuve suficiente confianza para enseñarle lo que tenía, ya que me daba mucha vergüenza. Él me animó a dar el paso.

Hay cierto punto y aparte con lo que habías hecho hasta ahora?
La rotura fundamental es que, evidentemente, será mi proyecto más personal. Todo parte de mí; la música y la letra. He recibido mucha ayuda, pero el origen es todo mío, esta es la gran diferencia. Con Élena escribía las letras de acuerdo con la música de los compañeros, y con Delafé y las Flores Azules andaba detrás del proceso de creación de Òscar [d'Aniello].

Has hecho un disco con muchos altibajos emocionales, hasta qué punto te define?
Da vértigo, pero la realidad es que con estas canciones me he desnudado totalmente. Me he pasado un buen tiempo pensante qué nombre le pondría al nuevo grupo, pero todo el mundo me decía: “Por qué un grupo? Eres tú!”. Y tenían razón, lo que pasa es que quería esconderme tras un nombre que me hiciera de máscara. Me he abierto y expuesto tanto en estas canciones, que quedo en evidencia emocional.

Y nuestras emociones, como tus canciones, pasan de la euforia a la tristeza con facilidad.
En 'El sol en la sombra' hay un poco de todo, también cosas antiguas que tenía escondidas dentro, pero no sólo hay temas personales. Por ejemplo, en 'A todos', hay una clara voluntad de reclamar que vayamos todos a una para conseguir cambiar las cosas.

¡A mí me había parecido una canción de autoafirmación!
Seguramente una de las cosas más bonitas de hacer canciones es que todo el mundo las interprete cómo quiera.

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