Autor y director: Llàtzer Garcia. Con: Muguet Franc, Guillem Motos, Ramon Pujol y Teresa Vallicrosa.
No conozco la relación de Llàtzer Garcia con la religión, pero sea cual sea, lo que vemos en su último texto es una reproducción fiel, terrible, del catolicismo más radical, más sectario como fuente de destrucción del individuo. En este caso se trata de dos niños y una niña abducidos por una abuela infernal que los quiere aislar del mundo corrompido bajo las indicaciones directas del creador. Claro que estos niños se harán adolescentes y no entenderán la bondad y espiritualidad que guía el fanatismo de su abuela y al cabo caerán víctimas del maligno que habita fuera del campus sagrado de Nazaret.
No es casual que el corte vertical de la roulotte donde vive la madre fundadora de la secta parezca una capilla de las dedicadas a la virgen María en medio de un gran espacio de caravanas seguramente más propio de algún estado del Midwest americano, que de la Girona natal del autor donde transcurre esta obra inspirada en hechos reales.
Ciertamente que 'Els nens desagraïts' habla de la familia y que en este sentido está emparentada con obras anteriores, como 'La pols', pero la cuestión familiar está empaquetada en una historia con atmósferas de los cuentos terroríficos de Stephen King, aunque no haya nada de sobrenatural, y que por momentos coja la maliciosa textura de 'La semilla del diablo' de Polanski. Muy buena dirección con un exquisito dibujo de los personajes y en particular de la madre fundadora, una especie de monja con unas maneras que retrotraen las de los colegios religiosos del años 60 en este país y que interpreta inquietantemente Teresa Vallicrosa. Hay que ir a conocer estos niños desagradecidos, aunque una cierta deriva argumental en el tramo final de la obra que se cierra con un exorcismo con vocación cinematográfica.