Autor y dirección: Ernesto Caballero. Con: Carmen Machi, Mireia Aixalà, Francisco Reyes.
Carmen Machi es una gran payasa. Y 'La autora de Las Meninas' se convierte en un vehículo no muy afortunado para su lucimiento. El autor y director Ernesto Caballero ha imaginado una distopía política para reflexionar sobre las vanidades del arte, en este caso de la pintura.
Una monja con gran reputación como copista de grandes obras clásicas recibe el encargo de hacer una copia de 'Las Meninas' que sustituya la original, primer paso de una operación política que pretende vender el patrimonio español para atender las necesidades sociales de una sociedad con crisis permanente. Caballero denuncia al mismo tiempo el desprecio de la política hacia la cultura con un futuro gobierno podemita (la acción transcurre en 2037) y la banalización del arte por la pérdida de los cánones y que en la línea de Albert Boadella cuestiona las vanguardias históricas e incluso la democratización del hecho artístico.
Un texto bien escrito pero que teatralmente resulta pesado y reiterativo. Sólo la entrega y buen hacer de una Carmen Machi a quien han vestido como una resucitada Sor Citroën puede llevar la propuesta hasta el final con una cierta amenidad.
Una monja con gran reputación como copista de grandes obras clásicas recibe el encargo de hacer una copia de 'Las Meninas' que sustituya la original, primer paso de una operación política que pretende vender el patrimonio español para atender las necesidades sociales de una sociedad con crisis permanente. Caballero denuncia al mismo tiempo el desprecio de la política hacia la cultura con un futuro gobierno podemita (la acción transcurre en 2037) y la banalización del arte por la pérdida de los cánones y que en la línea de Albert Boadella cuestiona las vanguardias históricas e incluso la democratización del hecho artístico.
Un texto bien escrito pero que teatralmente resulta pesado y reiterativo. Sólo la entrega y buen hacer de una Carmen Machi a quien han vestido como una resucitada Sor Citroën puede llevar la propuesta hasta el final con una cierta amenidad.