Autor: Enzo Cormann. Traducción: Joan Casas. Dirección: Nicolas Chevallier. Con: David Menéndez, Guillem Motos, Xavi Sáez.
'La revolta dels Àngels' es un “poema dramático”. Así lo quiso el autor Enzo Cormann y así se representa en el Akadèmia de la mano del director Nicolas Chevalier. Así es de una manera que más le convendría presentarse a unos Juegos Florales –y ganarlos, seguramente– que ocupar un escenario. La apuesta poética es excesiva, avasalladora.
Quién sabe cómo sonará la cantata de palabras en francés y con una dirección de escena austera, minimalista, que compense el empacho de bellas imágenes, de ornamentos metafóricos, de orlas líricas. En la traducción de Joan Casas y con los añadidos de Chevalier (oratoria sincopada, gestos coreografiados) las confesiones en el limbo-bar de Jean-Michel Basquiat, Chet Baker y Bernard-Marie Koltès quedan en un insignificante segundo plano, igual que se resistencia a ser mitos rehabilitados, purgados por su gloria póstuma.