Dramaturgia: Toni Gomila. Intérpretes: Toni Gomila y Catalina Florit.
Toni Gomila regresa a La Seca, acompañado por Catalina Florit, para compartir otro capítulo de su delicioso proyecto dramático-etimo-antropológico sobre el acervo popular mallorquín. Ahora de la mano de las “rondallas” recopiladas y purgadas por Mossèn Alcover en 1896, siguiendo la estela de los hermanos Grimm, aunque con menor conciencia de volcar sobre la tradición oral una identidad nacional.
El espectáculo es un subrayado irónico de aquello que escapó a la censura moral del mossén para hacer explícita la carga erótica de los cuentos, su crítica al poder y a la religión, desde la incorrección política del siglo XIX. La misoginia una constante natural. La conexión de la pareja de intérpretes es absoluta y el montaje una declaración de principios de un teatro ancestral sin barreras. El contrapunto de frialdad tecnológica de la puesta en escena rebaja ligeramente esa idea de proximidad, igual que cierta frivolidad en la inclusión de acentos foráneos que despiertan subtextos incómodos.