Autor: David Bo. Dirección e interpretación: Jaume Viñas y Toni Galmés.
El 'pitch' es una versión adulta del adolescente pidiéndole una paga extra a sus padres para sus cosas. Una ceremonia petitoria común en los circuitos de la producción audiovisual. 'Quan arribi la tardor' es el título del proyecto de película en busca de financiación. Esta estrategia de marketing presencial es el ligero envoltorio dramatúrgico de un espectáculo con dos objetivos más interesantes, mezclados con otros menos estimulantes: la biografía de un personaje que crece en protagonismo ante el espectador –con un discurso sobre el arte que engancha mucho más que su drama de superación–, y situar en un plano de normalidad las propuestas escénicas multidisciplinares.
Sin aspiraciones de radicalidad performática, con un tono amable y asequible, este montaje es la narración de un rapsoda del 'storytelling' (Jaume Viñas), la creación en vivo de un 'storyboard' (Toni Galmés) y el acompañamiento musical de un guitarrista (Gerard Bosch). Cuando el esfuerzo de los tres se centra en evocar la pedagogía heterodoxa del profesor retratado, cuando se habla de Rothko, Pollock o Cezanne, el proyecto adquiere otra prestancia y el público casi está deseando que esa mente abierta aparezca en La Seca con su carro de diapositivas bajo el brazo para continuar con su magistral lección sobre el valor del arte.