A ritmo de ferrocarril por el Garraf

Bajando del tren en Vilanova i la Geltrú tenemos allí mismo nuestro primer destino, que, ya os lo adelantábamos, es el Museo del Ferrocarril. Ocupa el antiguo depósito de locomotoras de la localidad, y cuenta con una exposición permanente con varios apartados, como la colección de elementos de estación o los de señalización. Pero sin duda la parte (por fuerza de gran tamaño) más comentada y visitada es la que agrupa a los vehículos de épocas diversas y, en especial, la valiosa muestra de locomotoras a vapor.

A pocos metros, una bella fachada da la bienvenida a una de las grandes pinacotecas del país. La Biblioteca Museo Víctor Balaguer muestra pinturas de Ramon Casas, Santiago Rusiñol, Joaquín Sorolla, El Greco o Goya, entre muchos otros nombres ilustres del arte. Pero además en la Sala Egipcia encontraremos piezas de este país africano e incluso la momia de un niño de cinco años, mientras que en el piso superior conviven artistas contemporáneos de la talla de Guinovart o de Ràfols Casamada. Finalmente, la biblioteca conserva aquel aspecto de tiempos pasados ​​con una colección de libros del siglo XIX.

En la capital del Garraf también tenemos que dar una buena vuelta por su núcleo, pasear por la Rambla Principal, entrar en la bonita plaza de la Vila y descubrir los entornos, llegar al Mercado del Centro, saborear la cocina de proximidad... Por cierto, ¡se nos ha hecho la hora de comer! Buscad en este enlace la oferta de restaurantes disponibles.

Con el tren iremos de Vilanova i la Geltrú a Sitges. En esta bonita y conocida población costera, seguro que lo sabés, hay mucho por ver, pero hoy queremos centrarnos en dos visitas muy concretas: el Centro de Interpretación de la Malvasia (CIM) y el Palau Maricel.

Empezamos por el CIM, porque ya tenemos ganas de conocer este espacio inaugurado el 13 de abril del 2019. Lo ha impulsado la Fundació de l’Hospital de Sant Joan Baptista de Sitges, está situado en el antiguo Corral de la Villa y la antigua bodega del Hospital, y ofrece un recorrido por el pasado vitivinícola de Sitges poniendo en valor el patrimonio colectivo que supone la malvasía de Sitges. La malvasía como tal es una variedad de cepa que da una uva pequeña y poco compacta, pero también se conoce con este nombre el vino elaborado con esta variedad, un vino licoroso blanco, dulce, oloroso y de alta graduación. En Sitges es todo un símbolo, y que contara con un centro interpretativo era sólo cuestión de tiempo.

Como también es un emblema el Palau de Maricel, la última estación de nuestro trayecto. También conocido como Maricel de Tierra y de estilo novecentista, tiene en la actualidad tres funciones: sede de eventos institucionales y culturales, espacio que acoge eventos de organizaciones y empresas, y punto turístico en el que se llevan a cabo visitas guiadas. Nosotros nos acogemos a esta última función para conocer sus majestuosas salas, la terraza y el claustro, y quedarnos con la belleza del conjunto en la retina como última imagen de la escapada al Garraf.