Dirección: Juan Pedro Campoy. Dramaturgia: Jordi Galcerán. Intérpretes: Cristina Alcázar, Francisco Boira.
Laura es una psiquiata a la que la vida pone en una encrucijada: un secuestro. Encerrada y amordazada en un sótano oscuro, descubre que Ramón, su exmarido, un tipo aparentemente normal, es un asesino en serie. Es en este contexto perturbador en donde él le propone jugar a las palabras encadenadas, un perverso pasatiempo en el que el premio consiste en recuperar la libertad. Desde ese instante, se sucede un juego de persecuciones en el que variarán las reglas del juego entre dos personas dispuestas a llegar hasta el límite.