Javier Manjarrés

Las rosas de Javier Manjarrés suman estética, poesía e historia; huelen a papel viejo y se pueden leer -encontraréis los remedios del doctor Tarrés-. Sus rosas están hechas con papel que recuperó de la trastienda de una farmacia de la calle del Carme, el corte se elabora con barritas de estor en desuso y los ata a los pétalos con hilos de seda antiguos. Si buscáis una rosa que nunca se marchite, la habéis encontrado.