Si hay alguna banda de metal que puede aspirar al trono del rock de estadios de esta era son, sin duda, los suecos Ghost (o más bien la banda liderada por Tobias Forge, el anti-Papa Emeritus, y su banda de enmascarados Necrófagos sin Nombre, que vendría a ser la traducción de Nameless Ghouls). La ascensión de Ghost ha sido sostenida, sin pausa, y ahora la curva sube hacia arriba a tope: de teloneros de Iron Maiden o Megadeth a estrellas del hard-rock que han logrado capturar la atención de los viejos metaleros y de la juventud: hermanan las entre 17 y 47 años, por decir algo.
Y lo cierto es que escuchando su nuevo disco, 'Impera' (2022), número 1 en Estados Unidos, Alemania, Suecia, e incluso España (le robó la cartera en C Tangana dos días), lo entendemos. Alejados de la temática satánica de sus inicios, 'Impera' habla de la ascensión y caída de los grandes imperios. Y tanta pompa se corresponde con un envoltorio musical épico, pero a la vez digestivo: una aleación de rock radiofónico con estribillos irresistibles y cierto aire a musical de Lloyd Webber, donde los Queen más duros y los Def Leppard más melódicos no esconden que les gusta Abba. Canciones como 'Kaiserion' podrían ir a Eurovisión y lo petarían. Si sumamos una teatralidad que recoge lo mejor de Alice Cooper con una estética deudora del black metal nórdico y el steampunk, ya lo tienes: un fenómeno musical de masas sin autotune.