Grec 2015: Yann Tiersen

Aunque sus trabajos para películas como Amélie (2001) o Goodbye Lenin! (2003) le hayan dado a conocer entre el gran público, Yann Tiersen no se considera un creador de bandas sonoras. Él es un músico ecléctico con influencias que van de la música de calle a los sonidos de vanguardia y del minimalismo al rock, el vals o la chanson francesa. En su nuevo trabajo, el octavo de estudio, elige una grafía que puede ser a la vez el número 8 o el símbolo del infinito como título. Y lo llena con los paisajes deshabitados y la naturaleza mineral de su Bretaña natal, pero también de Islandia o de las islas Feroe. Con temas en islandés, bretón y feroés, el disco tiene mucho que ver con los paisajes de una cultura celta que Tiersen defiende hasta el punto de soñar con una Bretaña independiente de Francia pero integrada en una Europa federal. Quien aún recuerde sus primeras obras con instrumentos de juguete verá cómo el artista recupera aquí aquellos sonidos, aunque ahora los manipula electrónicamente y los mezcla con sonidos acústicos en un viaje apasionante de ida y vuelta entre el mundo digital y el analógico.