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Ha sido uno de los regalos estrella de este año. Es un éxito de ventas absoluto y el rey de las conversaciones entre amigas, parientas y conocidas. Y digámoslo claro también: entre amigos, parientes y conocidos. ¡Casi que los hombres hablan más!
En poco tiempo los succionadores -y el Satisfyer para ser concretos- han revolucionado el mundo de los juguetes sexuales y ha provocado que el resto de fabricantes pongan sus departamentos de I + D a trabajar a toda máquina para intentar igualar o superar la intensidad de los orgasmos que provoca (y lo están consiguiendo, ¡seguid leyendo!). Basta dar un vistazo a alguna tienda erótica para ver que la repisa de los succionadores de clítoris está aumentando en variedad de tamaños, formas y colores. Pero nos preguntamos, ¿hay vida más allá del Satisfayer? La respuesta es un sí rotundo. Hoy os proponemos 4 alternativas que lo demuestran.
1. El placer de las ondas sónicas
Si nunca habéis pasado por el lado de un bafle en un concierto, habréis notado que cada pulsación de bajos os viene como un golpe invisible que os remueve. Los succionadores de Lelo hacen lo mismo pero concentrado y regulando la velocidad. La membrana de la apertura se va abriendo y cerrando permitiendo pequeñas pulsaciones de aire generando ondas vibratorias que, si lo ponemos cerca del clítoris, hace que se estimule tanto su parte externa como interna. Lelo ofrece dos modelos, el Sona y el Sona Cruise. La diferencia entre ambos es que el segundo tiene la tecnología 'Cruise Control' que hace aumentar la vibración cuando lo presionas contra tu cuerpo para que no reduzca la intensidad justo cuando el ritmo te está volviendo más loca. ¡Ooooh, yeah!
2. Succionador de viaje
Irse de vacaciones o de fin de semana implica hacer maleta, optimizar espacio y a veces sacrificar equipaje. Con los succionadores que ha creado Womanizer no habrá que sufrir porque ha conseguido reducir el tamaño de estas máquinas de placer hasta los 10 centímetros. El Womanizer Liberty hacia la funda de las gafas de sol. Es pequeño, pero valiente: tiene 6 modos de intensidad y ¡es sumergible! También podéis encontrar el Womanizer Starlet 2. No llega a los 12 centímetros y el poder de sus ondas garantizan haceros temblar de pies a cabeza. Womanizer tiene patentada una tecnología llamada 'Pleasure Air ™ Technology', que estimula el clítoris sin necesidad de tocarlo y que está ganando muchas fans.
3. Para los más frikis
Todos los succionadores de clítoris funcionan más o menos igual: el placer llega por ondas y vibraciones que activan la zona clitorial. A partir de aquí, hay diseños para todos los gustos. Una alternativa también muy potente es el succionador Pulpi Pig. A simple vista parece un cerdito inofensivo, o tal vez un pulpito con unos tentáculos que estimulan. Tanto es el animal que veis, el resultado será el mismo: los orgasmos más intensos que oiréis nunca.
4. ¿Succionadores de pezones?
¿Por qué no? Los pechos son una zona muy sensible que bien estimulada puede llevar al orgasmo. La tienda Amantis ha creado Dulce, un succionador de pezones que vale mucho la pena añadir en este lote de alternativas. El motivo: tiene una bala vibradora con 12 opciones diferentes de vibración que os permitirá regular la intensidad de las caricias y el placer que recibiréis. Y pensad: de pezones tenemos todas ... ¡y todos!
Y recordad, además del clítoris y los pechos, en el cuerpo hay más zonas eróticas donde poder experimentar. ¡Seguid explorando! El mundo de los succionadores empieza a no tener límite.