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La Casa Vicens, la primera obra de Gaudí te abre la puertas gratis un día (si compras una rosa)

La iniciativa se enmarca en el programa para celebrar Santa Rita, una tradición que tiene casi un siglo de historia

Laia Jordà Sánchez
Escrito por
Laia Jordà Sánchez
Redactora
Facade of Casa Vicens in Barcelona, Spain. It is first masterpiece of Antoni Gaudi. Built between 1883 and 1885
Photograph: Shutterstock
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La primera casa de Gaudí se podrá visitar gratis durante su día más especial: Santa Rita. La Casa Vicens volverá a abrir sus puertas el jueves 22 de mayo para celebrar una tradición muy arraigada en este espacio desde el año 1927.

Para entrar, eso sí, habrá que comprar una rosa en la parada solidaria de rosas y velas que estará instalada en el exterior desde las 9 hasta las 14 h y que recaudará fondos para la Obra Social Sanitaria Cor de Maria. Una vez tengáis la flor en la mano, podréis acceder al jardín de la Casa Vicens para participar en la bendición de las rosas de Santa Rita.

Más allá del puesto solidario y el acto de bendición, el programa para celebrar Santa Rita también incluye una misa a las 10:30 h en la iglesia de las Hijas de la Caridad, en la calle Carolines, 16. Además, la tribuna lucirá una decoración floral durante todo el día a cargo de Flores Studio Barcelona.

Una tradición con casi un siglo de historia

Santa Rita es la patrona de los imposibles y, en nuestra ciudad, para celebrar esta festividad, es tradición llevar una rosa bendecida a la Casa Vicens, beber agua de su fuente y pedirle un deseo a la santa.

¿Pero de dónde viene esta tradición? Durante la segunda mitad del siglo XVIII, una casa de convalecencia de los Carmelitas Descalzos del convento de los Josepets ocupaba el terreno donde ahora se encuentra la Casa Vicens.

El terreno también tenía una fuente de la que, según se decía, brotaba un agua que hacía que todo aquel que la bebiera se recuperase rápidamente. Ante este hecho, dedicaron el lugar a Santa Rita. Años más tarde, en 1927, se construyó una nueva capilla en el lugar de la fuente natural, la cual se incorporó a la finca de la Casa Vicens.

Fue la familia Herrero-Jover, que vivió en la casa desde 1899 hasta 2014, quien empezó a abrir las puertas del jardín cada 22 de mayo para mantener viva la tradición. Aunque en 1963 se derribó la capilla para construir un bloque de edificios, la Casa Vicens sigue acogiendo esta jornada especial cada 22 de mayo.

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