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Muchas personas escogieron estar en el escenario Pull and Bear del Primavera Sound el viernes a las 19 h. La mayoría eran fans de Manel, que seguro tuvieron que justificarse ante las inquisiciones de sus amigos: “¿Realmente quieres ir a Manel? ¡Pero si ya los has visto un montón de veces!”.
Me imagino que la respuesta que daban apelaba a la nostalgia; al fin y al cabo, la mayoría del público parecía haber nacido durante los 90 y principios de los 2000 y eso significa que han crecido con las letras de Manel. Pero hablar solamente de nostalgia sería sucio: Manel se ha mantenido relevante hasta 2022 gracias al constante cambio, la reflexión y la innovación musical. Nadie con sensatez dirá nunca que echa de menos la época del ukelele, simplemente porque estarán demasiado atareados tarareando el 'sample' de María del Mar Bonet de 'Per la bona gent'.
Los versos de Jacint Verdaguer que Guillem Gisbert canta en 'Formigues' fueron el pistoletazo de salida del concierto. El grupo optó por un repertorio festivo y animado con canciones como 'Sabotatge', 'Tipus suite', 'Teresa Rampell' y 'Boy band', y también regaló al público la versión reggaetonera de 'Al mar!'. Construida sobre la base de 'Mi gente', de J. Balvin, el tema forma parte de esta manía del grupo de revisar y reformular las canciones que les llevaron a ser “el grupo catalán revolución del 2008”.
Pero las cosas son como son: el momento más esperado del público llegó con 'Benvolgut'. La canción de Manel que más fans consideran como perfecta, emocionante e incluso misteriosa –hoy, todavía no hay un consenso sobre lo que ocurrió a los protagonistas del tema–. La gente cantaba la letra entera y no sería exagerado decir que "el meu dit resseguint-li la columna vertebral", fue la frase que sonó más fuerte de toda la noche del 3 de junio en el Primavera Sound 2022.