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Con el buen tiempo vuelve la horchata. Y un hecho cotidiano que nos alegra la primavera, esta temporada la esperamos con más ganas que nunca, por razones obvias. El próximo viernes 22 reabrirá puertas la Horchatería Sirvent de Parlament, 56 (la de Balmes, todavía no). Y lo hará con un horario extensivo: de 10 a 22h.
Nos lo confirma José Antonio Mullor, uno de los propietarios. "Está siendo muy complicada la reapertura, porqué hay que tener todo adecuado a la normativa", explica, pero ya tienen a punto su deliciosa horchata y helados. Con todas las limitaciones del contexto: metacrilato entre los vendedores y los clientes, medidas de higiene y aforo de tres personas dentro el local.
Pero si hay algún género de bebida que sea la genuina 'street drink' de Barcelona, esta es la horchata, con espléndidos representantes en nuestra ciudad. ¿Cuándo fue la última vez que te tomaste una horchata en un local cerrado?
También el Tío Che
Y en el otro punto emblemático horchatero de la ciudad, el Tío Che, ya abrieron la puerta desde mediados de mayo. Hay negocios que, por suerte, resisten años, dictaduras y catástrofes. El Tío Che, por ejemplo, que en 2012 cumplió cien años. Saber que vuelves a tener la posibilidad de pasear con un vaso de su horchata rambla abajo –no voy a entrar en el bizantino debate de si es o no la mejor de Barcelona– es una pequeña gran alegría de vivir.
También tienen a su disposición todo su ejército de helados (¡probad el de licor de chocolate con trocitos de naranja confitada!), Crepes dulces y saladas y brebajes deliciosos y valencianizantes: el café granizado con leche merengada, por ejemplo.
Me parece que si hubiera un apocalipsis zombi, los roedores de cerebros se detendrían de manera civilizada a hacer cola frente al muñeco. En todo caso, la tesitura no ha afectado al negocio de manera negativa; al contrario. Las míticas colas que se formaban ante la ventanilla se han ordenado y optimizado y la chufla sabrosa brota más rápida que nunca. Un diez para el Tío Che y la gente de Poblenou.