Sin patrocinio, premios ni permisos
Son los karts y no las bicicletas el origen de la Red Hook Crit. Con sólo 12 años, el fundador de la carrera, David Trimble, era un loco de la velocidad y del espíritu competitivo de estos coches. Con los años consiguió acceder al circuito profesional y entró a formar parte del equipo de Fórmula Renault. Pero la falta de dinero y de patrocinios lo alejó de las carreras -lo que realmente el apasionaba- y lo relegó al equipo mecánico. Hasta que en 2006 abandona definitivamente el automovilismo y se traslada, sin un chavo, a Red Hook (Brooklyn), donde se instala en el taller de carpintería de su tío. Y allí es donde cambia los coches para las bicicletas. Comienza a competir en los circuitos profesionales, pero pronto se aburre. Echa de menos aquel espíritu competitivo de los karts. Aquella rivalidad salvaje. Y decide crear una carrera sin reglas arbitrarias en la que gane sólo el más rápido.
En 2008, coincidiendo con su 26º aniversario, Trimble convoca ciclistas profesionales, amateurs, mensajeros y apasionados de las 'fixies' a una carrera por las calles de Red Hook. Sin patrocinadores, premios, publicidad ni permisos. La convocatoria no es ningún éxito pero el ambiente es espectacular. Kacey Manderfield, ciclista mujer, se impone al resto de hombres. Gana. Y aquí comienza la historia.