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Chingón (CERRADO)

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Time Out dice

Este establecimiento ha cerrado.

La mentira de comer en Estados Unidos: "Muy buena la hamburguesa y la barbacoa, pero nada más".
Este tópico es tan falso como el que se encontró el cocinero de El Ejido Miky Manrubia cuando llegó a Miami. "Pensaba que era la Ibiza de los 'Estates', y me encontré una ciudad de jubilados". Manrubia, a quien distinguimos de un rapero chicano –tatuajes, estética 'lowrider'– por su acento andaluz, dio el salto a Los Ángeles estilo Axl Rose 1985:' 'welcome to the jungle ', "sin un puto duro, casi pidiendo dinero en la calle y comiendo 'burgers' de dólar ", rememora. El joven cocinero tenía CV en cocina de club ibicenco pero también en Barcelona (tres años entre Neichel y Codium). Y en Los Angeles pasó de la calle al 'fine dining ': ha cocinado en demasiados sitios para enumerarlos, pero volvió a Barcelona con el concepto de gastropub de Los Ángeles clavado entre 'piercing' y 'piercing: "Lugares donde se mezcla la comida de calle con influencias de todas las partes de la ciudad: Chinatown, Koreatown, los barrios latinos, Little Italy ... ".


Este es el punto de partida del Chingón BCN -primero en abrió uno en El Ejido-, inclasificable local de estética urbana 'trash' donde la 'taquería' tradicional comparte techo con el sudeste asiático y la barbacoa norteamericana ( en la entrada encontraréis una parrilla de carbón). De hecho, Manrubia ha hecho un taco con todo lo que aprendió: desde la salsa barbacoa que le enseñado Michael Wilson, cocinero hijo del 'beach boy' Dennis Wilson-, hasta las salidas que hacía para probar un chino de una región diferente cada semana. Sofisticación, mucho sabor y picante juntado con la filosofía pantagruélica popular yanqui: más y mejor.

Por apenas 20 euros, te despachan un menú degustación de 'street food chingón' que comienza con un chupito de ostra Gun (Francia y Vietnam en un sorbo de marisco) y sigue con un taco de pulpo gallego (¡kimchi vs. 'chipotle'! Picante matizado al límite, buenísimo), y compensa la intensidad con una suave' quesadilla 'de confit de pato con' hosin 'y aceite de trufa que es adictivo. El gran final es alta cocina de los Estates: costillar porcino catalán Duroc -con dicha barbacoa- marcado en leña y ablandado en horno de baja temperatura. Postres: el Donut Cerdo de LA (el 'pijama' de Los Ángeles!) es demasiado obsceno para describirlo, demasiado bueno para olvidarlo. Catalán sosainas, come en Chingón.

Ricard Martín
Escrito por
Ricard Martín

Detalles

Dirección
Pallars, 329
Barcelona
08005
Contacto
618 51 04 93
Transporte
M: Selva de Mar
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