Elisabeth Veciano es el alma y propietaria de La Glace, una heladería multiuso encajonada en una encantadora esquina de Paseo de San Juan. Ella dice que esto es como el film de 'Smoke', donde desde un estanco Harvey Keitel veía pasar historias humanas, y es cierto: la esquina es privilegiada, y ella tiene un pequeño arsenal de comida buena y apetecible para hacer la vida más agradable al ocasional.
La principal, un expositor de helados sabores clásicos que compra a un artesano de calidad: chocolate, vainilla, avellana, café, pistacho, coco, por la parte del helado, y sorbetes de frambuesa, limón, mango o maracuyá. También hay empanadas estilo argentino que sí cocina ella: carne picante, espinacas y mozzarella o caprese, las de toda la vida. Su filosofía es construir un Tetris esquinero de cosas buenas para cada momento y época, sea horchata, pasteles, café o granizados.