Autor: Mike Bartlett. Dirección: Pau Roca. Con: Joan Carreras, Jordi Rico, Marc Rodríguez y Mar Ulldemolins.
¿Torero o toro?, nos preguntan justo antes de empezar la función de 'Bull'. Como si se pudiera elegir. No, Thomas no podrá escoger porque es la víctima de este ritual de humillación en el mundo laboral. Desde prácticamente el inicio vemos que él es el toro, al que sus dos compañeros de trabajo, la provocadora Isabel y el suficiente Tony, clavarán banderillas, la puntilla e incluso le darán el remate final al son de un pasodoble .
El guionista y dramaturgo británico Mike Bartlett se ha servido del símil taurino para vestir 'Bull', un texto actual y punzante que no deja indiferente y que remueve las entrañas mostrándonos la crueldad de las relaciones laborales cuando hay que despedir a alguien. Isabel, Tony y Thomas han sido convocados por el director a una reunión en la que uno de ellos perderá su puesto de trabajo. Pero Isabel y Tony parece que saben muy bien a quién le tocará recibir y pese a ello maltratarán a Thomas en un ritual en que éste no podrá sino lanzar cornadas inútiles. Al fin, la obra trasluce como las apariencias e incluso el estrato social son más importantes que la faena bien hecha y como todo vale en la defensa del puesto de trabajo.
Con buen ritmo, con un espacio escénico vacío que funciona de maravilla y una solvente interpretación de Mar Ulldemolins, Joan Carreras, David Bagués y, sobre todo, de Marc Rodríguez, la dirección de Pau Roca es quizás un poco demasiado exagerada en el primer tramo de la pieza, que tiene un tono más comediogràfic,o porque la exageración sarcástica incita a la risa y entiendo que lo que procede es golpear al espectador. Esto no quita que la comedia funcione y llegue a un público que reaccionará con más o menos estupor según si ha sentido o no la impotencia frente a unos mecanismos mercantiles deshumanizados.