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Doblete monumental vallesano
Nos escapamos en transporte público a conocer el monasterio de Sant Cugat y la Seu d'Ègara en Terrassa
Estamos cansados del coche. Así que para nuestra escapada a la comarca del Vallès Occidental hemos elegido ir a visitar dos grandes conjuntos monumentales, el monasterio de Sant Cugat y la Seu d'Ègara en Terrassa, a los que se puede llegar fácilmente en transporte público. Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), la Diputació de Barcelona y Barcelona Turisme nos lo ponen en bandeja, los primeros porque sus trenes nos comunican de manera rápida y con mucha frecuencia con las ciudades en los que están los monumentos que queremos ir a conocer, y los segundos porque ofrecen una entrada combinada muy bien de precio y que se puede adquirir por Internet y en las principales oficinas de turismo de Barcelona. Las entradas incluyen audioguía y para los menores de 6 años son gratis. Así que no nos lo pensamos más ¡y subimos al tren!
CON LA COLABORACIÓN DE BARCELONA ÉS MOLT MÉS DE LA DIPUTACIÓ DE BARCELONA.


El monasterio de Sant Cugat
Bajamos del tren en la estación de FGC de Sant Cugat y vamos tranquilamente hasta una de las construcciones que nos hablan de la importancia histórica de la comarca. El Real Monasterio de Sant Cugat fue el más relevante en la época medieval de todo el condado de Barcelona. El gigantesco rosetón gótico que preside la fachada nos da buena muestra de su magnitud, así como los muros y las torres que, levantadas en el siglo XIV, todavía se mantienen en pie. La abadía, benedictina, tiene sus orígenes en el siglo IX, y hoy se conserva en muy buen estado la iglesia y, sobre todo, el claustro, la joya de la corona, románico y con unos capiteles que merecen que nos fijamos detenidamente. El mismo claustro acoge la sede central del Museo de Sant Cugat, alrededor del cual está la sala capitular y las antiguas dependencias monásticas.

